‘Ámame u ódiame’ dice la maravillosa fruta llamada ‘pomelo’, ‘grapefruit’ o ‘toronja’. Las ‘celebrities’ de medio mundo la idolatran por sus propiedades adelgazantes ya que parece ser que su bajo índice glicémico ayuda al cuerpo a quemar grasa. Lo que es verdad es que es baja en azúcar, calorías y alta en vitamina C y licopeno que es un poderosísimo antioxidante.
Y precisamente por sus propiedades antioxidantes, mis bellas lectoras, es por lo que es tan buena para nuestra piel si la aplicamos como mascarilla semanal. Vas a notar una mejora en el tono de la piel, menos manchas y líneas de expresión más suavizadas. Así que con esto viene, inevitablemente, el primer truco de belleza con nuestro pomelo:
Mascarilla facial antienvejecimiento
- 1 cucharada de miel
- 1/2 taza de copos de avena
- El zumo de medio pomelo
Mezcla los tres ingredientes y aplícalos generosamente por todo el rostro, cuello y escote bien limpios y, a ser posible, tras haber aplicado vapor. Déjala actuar hasta que se seque y retírala con un paño del rostro empapado en agua tibia. Termina con un ‘splash’ de agua helada.
Importante: Recuerda siempre usar protección solar el día que te hagas esta mascarilla (aunque deberías usarla todos los días del año ¡ya que el sol es el responsable de hasta un 95% del envejecimiento de la piel!)
De tiendas: si prefieres comprar una mascarilla de pomelo, puedes probar la Eminence Pink Grapefruit Clarifying Masque
Además de ayudar a mantener la piel joven, el pomelo también es un magnífico astringente. Si sufres de acné relacionado con piel grasa (no de acné adulto hormonal) o si, simplemente, tu rostro tiende a brillar como un espejo a eso del medio día, arruinándote el maquillaje, es hora de emplear a nuestro soldado cítrico.
Tónico facial astringente anti brillos
- El zumo de un pomelo
- Un puñado de menta o lavanda
Mezcla el zumo del pomelo con la menta fresca o la lavanda. ‘Estruja’ un poco la planta que hayas elegido para que suelte mejor sus propiedades en el zumo. Déjalo reposar al menos 3 horas en la nevera, cuélalo y pásalo a una botella de vidrio con 10 gotitas de alcohol (para ayudar a conservarlo). Aplícalo por las zonas problemáticas, evitando los ojos, con un algodón por la mañana y por la noche sobre el rostro limpio y antes de aplicar la hidratante y el protector solar (súper importante el protector de nuevo porque los cítricos con el sol pueden provocar manchas). También puedes poner el líquido en un spray y aplicarlo de esta manera. Guárdalo en la nevera.
De tiendas: si lo prefieres puedes probar el Sisley Grapefruit Toning Lotion Combination/Oily Skin
Ya sabéis que yo soy una adicta del cuidado de la melena por todos mis problemas con el SOP y la caída (puedes leer más acerca de este problema y cómo lo superé aquí). Siempre estoy – y estamos – probando decenas de productos nuevos, champús engrosantes, leches protectoras, aceites de brillo, lacas, champús en seco, ceras y polvos. Al final el residuo de todos estos productos se va acumulando y nos encontramos con una melena pesada y sin brillo. El pomelo viene al rescate.
Purificador del cabello
- El zumo de al menos 2 pomelos filtrado para que no quede pulpa.
Lávate el cabello como normalmente haces. En el aclarado final vierte el zumo por toda tu melena empezando por las raíces y dejándolo caer hacia las puntas. Masajea durante unos segundos y déjalo actuar al menos un minuto. Aclara y termina con agua helada en los largos. Resultado: ¡adios a todo el residuo acumulado, hola melena brillante!
De tiendas: si lo prefieres puedes eliminar los residuos de tu cabello con el Burt’s Bees Grapefruit and Sugarbeet Shampoo (¡que huele delicioso y es libre de sulfatos! Mi compañera de piso lo usa y es ¡mmmm!)
Ahhh… pues con tantos usos hemos exprimido bien nuestros pomelos y les hemos sacado todo el jugo de su belleza. ¿Verdad que no hay nada como aprovechar los regalos de nuestra madre Tierra para embellecernos? Usad estos trucos durante unas semanas y veréis los resultados. Y recordad: si además bebéis el zumo, no os olvidéis de lavar o enjuagar los dientes inmediatamente para evitar daños por el ácido que pueden dar lugar a caries. Os lo dice mi papá que es odontólogo
¡Feliz mitad de semana, guapuras! ¡Espero que os hayan gustado las fotos que os he hecho y que os llenen el día de vitaminas!