Han pasado 31 556 926 segundos, miles de sensaciones, ojos taciturnos con miradas ansiosas, movimientos corpóreos, sonidos diversos, halitos de emoción, neostalgías y retazos de vidas, a veces el simple animo del anonimato o del mutismo, en ocasiones alguna idea transfigurada en placer y en menor escala partes de uno mismo.
En ocasiones me creo parte de aquellos que mantienen o dan seguimiento a la próxima letra, sin embargo, son sus ojos los que van construyendo parte de mis dedos.
Ante ello, sólo me resta agradecer por dejarme plasmar lo que van imaginando.
Y a ti... el siguiente post.