Los restos de comida, la suciedad del ambiente, o el sudor corporal se adhieren en los tejidos de la ropa y con el tiempo empiezan a lucir deteriorados. Es por esto que aquí te daremos varios trucos caseros para blanquear la ropa.
Las prendas blancas siempre llaman la atención por la facilidad que nos brindan para combinarlas con otros colores, pero existen quienes no las eligen debido a que se ensucian muy fácilmente, y terminan adquiriendo un tono percudido, que hace que luzcan amarillentas.
Para solucionar esta problemática, infinidad de compañías a nivel mundial han desarrollado gran cantidad de productos de limpieza que ayudan a blanquearlas y a que conserven eficazmente su tono original. Sin embargo, muchos de estos productos contienen químicos muy agresivos, capaces de causar daños a la salud, al medio ambiente, e incluso a la prenda que queremos blanquear.
Afortunadamente, también existen diversas soluciones naturales que se pueden preparar desde casa, y persiguen el mismo fin, teniendo la ventaja de que son muchísimo mas económicas, y súper ecológicas. Aquí te presentamos algunas de ellas, empieza desde ya a ponerlas en práctica.
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4 trucos caseros para blanquear la ropa
1. Bicarbonato de sodio:
El bicarbonato de sodio es maravilloso, pues si lo usas al lavar tus prendas, no solo lograras blanquearlas, sino que también las suavizaras. Este ingrediente reduce notablemente las manchas en la ropa, y mejora los efectos del jabón habitual sobre la ropa.
Para este truco debes sumergir la ropa en un poco de jabón en polvo y agua, y luego añade tres cucharadas de bicarbonato de sodio. Remueve muy bien la ropa, y deja que actúe esta preparación durante aproximadamente 20 minutos. Transcurrido este tiempo, lava como de costumbre.
2. Limón y sal:
El jugo de limón es uno de los mejores ingredientes para aclarar, y así realzar los tonos blancos en la ropa. Si lo usas sobre las prendas, lograras mantenerlas siempre libre de manchas de suciedad o percudido.
La preparación también es muy sencilla. Debes empezar vertiendo los litros de agua en un recipiente, junto con el jugo de dos limones. A esta solución añádele media taza de sal, y un poco de jabón neutro. Solo debes introducir las prendas en esta mezcla, y dejaras allí remojando por al menos una hora. Luego de este tiempo, enjuaga como de costumbre, y pon las prendas a secar al sol.
3. Vinagre de manzana:
Si tus camisetas favoritas están llenas de manchas en las axilas, te sorprenderás de lo efectivo que puede resultar el vinagre de manzana para eliminarlas. Este vinagre contiene propiedades que extraen los restos de sudor y de desodorante de la prenda, devolviéndole así un tono más blanco.
Para aplicar este truco basta con que apliques un poco de vinagre de manzana sobre las zonas de desees blanquear, y deja que actúe allí durante media hora. Después enjuaga normalmente. Debes repetir este procedimiento en cada lavada.
4. Agua oxigenada y limón
Ambos ingredientes están compuestos de ciertas sustancias capaces de remover todo el percudido y las manchas de forma muy eficaz, así que si se combinan en un solo producto obtendremos resultados fantásticos para blanquear nuestra ropa.
¿Qué debes hacer para llevarlo a cabo? Sencillamente extrae el jugo de un limón, y mézclalo con una taza de agua oxigenada, mas dos vasos de agua. Puedes usarlo en el ciclo de enjuague de tu lavadora, o bien si prefieres lavar la prenda a mano, solo debes sumergir la prenda dentro de esta preparación.
Estas son las mejores y más eficaces alternativas para conseguir eliminar el percudido que tanto nos molesta, ya que hace que nuestra ropa se vea mal. Así que no dudes en usar alguno de estos trucos para blanquear la ropa, y comprueba por ti misma lo buenos que son para deshacernos de ese problema.
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Esto que ves soy yo... ni más ni menos, un pedazo de ser, un trozo de humanidad, un puñado de risas, una cuota de locura, una pizca de dulzura. Esto que ves soy yo... una mujer, a veces niña, a veces infinita, a veces apasionada. a veces entregada. pero siempre soñadora, es todo lo que tengo, es todo lo que soy... no es mucho, pero es todo...