4 tontos pasos para una colada inteligente

Por Cooliflower

28 de mayo de 2015

¿Tu colada no te termina de convencer? ¿Tus camisetas recién lavadas huelen a choto? ¡A continuación encontrarás cuatro simples pasos para hacer el uso de tu lavadora más eficiente!

    Menos es más. ¿Terminas la colada y al tacto la encuentras viscosa? ¿Te parece que la ropa está menos limpia de lo que debería... y cada vez añades más detergente y suavizante? ¡Mal asunto! Has entrado en el ciclo de dejar tu ropa apestosa, a la par que plastificada. Los componentes, ya de por sí concentrados, han creado una película, una barrera que aísla la suciedad. Cuanto más químicos utilices, más difícil será que quede limpia. Pon solo lo justo. Tu ropa al tacto estará menos suave, a cambio no olerás a mezcla de ambientador de coche y "eau de Sobac".
    Menos es más II (segundas partes nunca fueron buenas): ¡Desodorantes efecto "cartón"! Podrías utilizar piedra de alumbre, pero piensas que no te "protege" demasiado. Para sentirte 48 horas-muñeco-de-plástico usas un desodorante muy potente en barra o roll-on. Y como eres persistente te untas y restriegas bien las axilas, cual pan con mantequilla; y esa potente mezcla en el tejido va directa a una lavadora, a la que se suma el pringoso suavizante. El olor de unas axilas sanas se va con el lavado; el aroma del desodorante más los tensioactivos sobrevivirá tu colada, y también la existencia del hombre sobre la Tierra. Amén.
    Hay que llenar bien la lavadora... pero no te flipes. Uno de los consejos ecológicos clásicos es "para ahorrar agua, intenta aprovechar al máximo la carga de la lavadora". Una cosa es aprovechar el espacio y otra diferente necesitar un ariete para cerrar la puerta. Las prendas necesitan espacio para moverse, de otro modo lo único que haremos será centrifugar una masa de roña húmeda. Prueba a meter la mano en la parte superior del tambor de carga. Si esto no es posible, desaloja. Tener que lavar dos veces toda la colada es menos ecológico que incluir una toalla menos...
    Alternativas naturales, mucho mejores. Más de una vez habrás notado picores, te habrán salido granitos... ¿Te sentó mal el pisto, o quizá el motivo sea más cotidiano? Piensa que pasas la mayor parte del tiempo con tu piel rozada por tejidos. Incluso si eres de los nuestros, de los que dormimos con las cosicas al aire, lo harás tapado/a por sábanas. Los buenos jabones ecológicos están diseñados para contaminar menos, y no provocar reacciones alérgicas en la piel. Prueba y luego nos cuentas.

En cuanto al suavizante: No existe uno mejor, más barato, que el vinagre de manzana. Es bactericida, la ropa huele a limpio (no a droguería) y tu piel se siente bien, sin traumas. Un matiz para dummies: ¡Por favor, vinagres sin aderezar! Los aderezos aromáticos de Módena... para la ensalada.