400 es sólo un número. También una palabra, cuatrocientos, o quatrocientos, antigua forma de escribirse que parece que también es aceptada. Hace 400 años Galileo observó por primera vez Neptuno, y siguiendo con las astronomía, casualmente hace 400 días, hubo un eclipse de luna. Yo ese día no os hablé de ningún eclipse, sino que comenzaban mis vacaciones, y os conté estas casi 400 palabras 400 años fueron los que pasaron entre los últimos escritos del antiguo testamento, y los primeros del nuevo, como 400 son los grados centesimales de un círculo, y algo más que eso, resulta que es un número de Harshad, sea lo que sea eso. 400 meses atrás, comenzó la mítica serie Dallas al otro lado del charco, mientras que en Barcelona tenía lugar una importante feria de la alimentación. 400 años hace del primer telescopio fabricado por Kepler, mientras que 400 días atrás el G-20 se reunía en Toronto para intentar arreglar el mundo, y AC/DC tocaba en la ciudad de Sevilla. Y así hasta el infinito, o hasta 400, el cuadrado de 20, el número de veces que os he venido a contar cosas como éstas. Porque hoy cumplo 400 entradas, 400 historias, 400 momentos. Y aunque 400 es sólo un número, sólo me queda daros 400 veces las gracias.
400 es sólo un número. También una palabra, cuatrocientos, o quatrocientos, antigua forma de escribirse que parece que también es aceptada. Hace 400 años Galileo observó por primera vez Neptuno, y siguiendo con las astronomía, casualmente hace 400 días, hubo un eclipse de luna. Yo ese día no os hablé de ningún eclipse, sino que comenzaban mis vacaciones, y os conté estas casi 400 palabras 400 años fueron los que pasaron entre los últimos escritos del antiguo testamento, y los primeros del nuevo, como 400 son los grados centesimales de un círculo, y algo más que eso, resulta que es un número de Harshad, sea lo que sea eso. 400 meses atrás, comenzó la mítica serie Dallas al otro lado del charco, mientras que en Barcelona tenía lugar una importante feria de la alimentación. 400 años hace del primer telescopio fabricado por Kepler, mientras que 400 días atrás el G-20 se reunía en Toronto para intentar arreglar el mundo, y AC/DC tocaba en la ciudad de Sevilla. Y así hasta el infinito, o hasta 400, el cuadrado de 20, el número de veces que os he venido a contar cosas como éstas. Porque hoy cumplo 400 entradas, 400 historias, 400 momentos. Y aunque 400 es sólo un número, sólo me queda daros 400 veces las gracias.