412.- "Ese día llegará, puede ser hoy o dentro de cincuenta años, pero la única cosa segura es que llegará."

Autor: Ayrton Senna. Cuando la espera para que cambie una situación adversa se prolonga y cobra tintes de eterna, es normal que perdamos la fe y que tengamos, además, el legítimo derecho a ello. Somos héroes en potencia que, a medida que el tiempo va desgastando nuestros sueños, tendemos a venirnos abajo sin solución y hay que estar muy convencido y, sobre todo, disponer de una esperanza sin fisuras, para no claudicar ante el desaliento.
Esperanza no es fingir que no existen los problemas, pero sí que estos tendrán fin. Es la confianza de saber que las dificultades no son perpetuas, que las heridas curarán, y que la adversidad se acabará superando. Es también quizá lo único que nos puede mantener en pie, cuando estamos desesperados. Como decía Jean Kerr: “La esperanza es el sentimiento que te hace sentir que lo que tienes no es permanente.”
Hoy traigo hasta el blog una de esas historias de redención, que te reconcilia con la esperanza y que muestra, en claro ejemplo, lo importante que es no desprenderse nunca de ella. No importa lo mal que nos encontremos. No importa en qué delicada o triste situación nos haya colocado la vida; lo importante es mantener la fe en que es posible que todo pueda cambiar de repente.
Su historia pasó de una entrevista a un periódico local, a Youtube y de ahí a la fama en unas pocas horas. Ted Williams, un vagabundo de Brooklyn que acabó en las calles de Cleveland tras un largo historial de problemas con el alcohol y las drogas, fue entrevistado por uno de los periodistas del Columbia Dispatch que se interesó por el cartel que sostenía mientras pedía ayuda junto a un semáforo.
En ese cartel, Williams aseguraba tener "un regalo de Dios, una voz dorada", algo que el periodista pudo comprobar al pedirle un pequeño ejemplo. Williams hizo la demostración y a partir de ahí, el vídeo grabado de ese encuentro se expandió a gran velocidad por Internet hasta convertirse en uno de los más vistos. Sólo en Youtube ya ha recibido más de seis millones de visitas. Gracias a esa entrevista, realizada en diciembre, Ted Williams es hoy un hombre nuevo y le llueven las ofertas de trabajo.
Incluso cuando no hay esperanza, la hay. Incluso cuando todo parece perdido, no lo está del todo. Hay remedios para los 'sin remedio' y soluciones para los problemas irresolubles. Por ello, siempre vale la pena resistir.
Reflexión final: los fuegos vitales consumen nuestra resistencia, pero no eternamente. Si tenemos suficiente valor para aguantar, el viento cambiará o el fuego simplemente se extinguirá.