Hace poco más de cinco años se publicó el primero de los artículos en este blog Por los Derechos de la Infancia. Al volver la vista atrás, podemos ver que las mujeres han sido las protagonistas de la mayoría de las entrevistas y testimonios citados en los artículos del blog. Son más de la mitad de la humanidad y constituyen la gran mayoría excluida del ámbito de los derechos humanos, porque las desigualdades por razón de género, propias del sistema patriarcal, afectan a todas las sociedades.
El blog ha presentado los testimonios y los escritos de mujeres ejemplos de lo que es el empoderamiento femenino, como proceso de toma de conciencia de derechos negados y de activismo a favor de su restitución en todos los ámbitos. Este empoderamiento es una condición previa para lograr todos los objetivos de la Agenda 2030, tal como han reconocido agencias como ONU Mujeres. Es por ello por lo que, desde Global Humanitaria las consideramos auténtica Mujeres para el Desarrollo.
Mujeres como Petrona Chubb, campesina de Guatemala, quien, después de sufrir las consecuencias de un matrimonio que ella calificó como ‘servicio militar’, impulsa ahora proyectos comunitarios en la aldea de Santa Cruz. “El machismo ha calado hondo tras la colonización y bien aprendieron la lección muchos hombres mestizos e indígenas. Ahora no queremos sólo palabras, queremos la participación de hombres y mujeres, tenemos que andar por el camino de la igualdad”, nos dijo.
También sobre la pervivencia del sistema patriarcal en las sociedades tradicionales nos habló la abogada peruana Belia Quiñones, que nos evocó como son, todavía hoy, las reuniones en las comunidades alto andinas. “Solo los hombres se sientan en las sillas, mientras las mujeres se sientan en el suelo. Las mujeres no hablan. Los hombres llegan a caballo, las mujeres a pie. Pero son ellas las que tienen que llevar la comida”.
La pervivencia de los estereotipos de género se explica por la reproducción de patrones culturales aprendidos, grabados a menudo junto a preceptos religiosos que explican, en ultima instancia, la violencia contra las mujeres, como nos contó la cineasta británica Leslee Udwin, que retrató en el documental ‘La hija de la India’ la cultura que amparaba las violaciones de mujeres en este país asiático. “Si a una niña no se le da valor, si vale menos que un varón, entonces es lógico que haya hombres que crean que pueden hacer lo que quieran con ellas”.
Y ante la falta de alfabetización básica, no hay sistema legal que pueda proteger a las mujeres, como sucede en Costa de Marfil, donde cerca de un 60% de las mujeres no saben leer ni escribir. “Demasiadas mujeres, tanto en zonas urbanas como en zonas rurales, desconocen sus derechos y deberes, hasta los más elementales”, nos explicó Fatima Diabaté, de la Asociación de Mujeres Juristas de este país africano. “Salvo raras excepciones, muy pocas mujeres se interesan por los asuntos jurídicos, ya que piensan que es un tema “de hombres”.
Campesinas, artistas, activistas, abogadas, educadoras, investigadoras, maestras… La discriminación por razón de género forma parte de la experiencia de millones de mujeres. En un estudio de 2015, Naciones Unidas reveló que la violencia de género afecta a más de un tercio de mujeres en todo el mundo.
Para cambiar el rumbo “es absolutamente necesaria la implementación de una educación basada en la igualdad, la pluralidad y la diversidad, que se dé un reconocimiento social y económico del trabajo de las mujeres en el ámbito doméstico, y que acabe con los obstáculos que desde las empresas impiden la conciliación familiar y la corresponsabilidad llevando a un reparto equitativo de las tareas del hogar, nos recordó Laura García, de la Asociación ‘Por ti, mujer’.
El cambio en la educación es el primer paso para cortar con la raíz de los estereotipos, que también deben atacarse con la mayor presencia de las mujeres en los espacios de toma de decisiones políticas, sociales y culturales; en la dirección de empresas y movimiento sociales. Y también poniendo en tela de juicio los mensajes de los medios de comunicación y la publicidad que sexualizan y cosifican los cuerpos de las mujeres, como también incidía Mónica Novillo, Secretaria Ejecutiva de la Coordinadora de la Mujer de Bolivia.
En este enlace te dejamos algunas de las más de 30 entrevistas que hemos publicado en estos 5 años, la mayoría de ellas. ¿Cuál ha sido tu favorita? Cuéntanoslo en los comentarios o dinos tu opinión en las redes con #5BlogInfancia.