Jesús fue muy tajante en decir lo que nos ocurriría si le negamos (Mateo 10:33), pero al parecer se nos olvidó. El acto de negarle a hecho que la gloria sea nuestra y no del Padre, y como resultado Su Presencia se ha apartado de nosotros completamente. Veamos entonces estos 5 casos en que los cristianos estamos negando a DIOS.1.- CUANDO NEGAMOS EL RECONOCIMIENTO QUE MERECE DIOS EN NUESTROS LOGROS.¿Te acuerdas lo que hizo Elías frente a los 450 profetas de Baal? El acto que desencadenó el descenso de fuego del cielo no fue por el mismo profeta sino porque él reconoció a DIOS delante del pueblo de Israel y los profetas de Baal (1 Reyes 18:36-37).¿Lo mismo pasa con nosotros? En algunos pocos sí, pero no en todos. Cuando recibimos un reconocimiento, un ascenso en el trabajo, un título, un aumento de sueldo, un cargo en la iglesia, etc, se nos olvida quien es el que nos puso en ese nuevo lugar. Olvidamos que pasamos el tiempo rogando para que DIOS nos permita alcanzar una meta, y cuando lo hemos logrado, nos olvidamos de quien merece el reconocimiento y que nosotros somos simples administradores. Y sí, estas líneas también va para mis amigos los músicos.
2.- CUANDO ESTAMOS BAJO PRESIÓN DE GRUPO.Yo mismo sé que es sentirse rechazado y burlado por tu grupo de amigos. Muchos con tal de ser aceptados somos capaces de ocultar nuestra fe y terminar convertidos a ellos (Jeremías 15:19).No es fácil sentirse de otro planeta, y menos hacerse de la vista gorda cuando una chica no evangélica te gusta, pero aun así, saber soportar la presión y anteponer a DIOS sobre lo demás es la mejor declaración de nuestra convicción al mundo.Y no es que vayas a soportar la presión de grupo usando tus fuerzas, sino que debes llenarte tanto de DIOS (leyendo tu Biblia, orando, yendo al templo, escuchando música cristiana) que las burlas de tus amigos no te harán daño sino que serán un motivo más para predicarles de Jesús.3.- CUANDO TU FAMILIA TE RECHAZA.Se de jóvenes que han vivido toda clase de burla y rechazo por parte de su familia cuando confesaron que habían aceptado a Jesús en su corazón, algunos resistieron, otros terminaron negando su credo y apartados de DIOS. A nadie que halla decidido ser discípulo de Cristo le ha ido color de rosa, muchos han sufrido burlas, insultos, cárcel y hasta muerte a pedradas como el caso de Esteban. El cielo lo arrebatan solamente los valientes, aquellos que no les importa que su familia los haga a un lado (Salmo 27:10), pues todo lo han dado por perdido para ganar a Cristo (Filipenses 3:8). Entonces la pregunta correcta sería: ¿Estás dispuesto a pagar el precio?4.- CUANDO LA IGLESIA SE ESTÁ QUEDANDO VACÍA.No sé si te habrás dado cuenta pero hoy las iglesias han pasado de ser un lugar donde la Presencia de DIOS es manifestada a convertirse en un CLUB SOCIAL. Se ha negado completamente a DIOS y como resultado las iglesias están cada vez más llenas de gente pero vacías de DIOS.
Los pastores al ver que pierden feligresía han optado por cambiar sus mensajes a simples charlas motivacionales, se han vuelto muy permisivos en todas las áreas y el pecado se ha convertido en una manchita que puedes borrar con una buena ofrenda. En otras palabras, nos hemos ido en pos de otros dioses. Nos hemos vuelto idolatras y buscamos nuestra gloria en vez de la gloria de DIOS.Si estas presenciando esto en tu iglesia es una clara señal de que debes salir huyendo de ahí por tu vida.5.- CUANDO SE TRATA DE HONRAR A DIOS CON NUESTROS BIENES.Del tema de diezmo, ofrenda y primicias tú ya debes saberlo de memoria, en cambio, quiero hacerte recordar cuanto hemos negado a DIOS con nuestros bienes. Y con esto me refiero a aquellas veces en que negamos la ayuda al pueblo de DIOS, o a quienes lo necesitan y están fuera de él.Podríamos confesar a DIOS con nuestros vienes brindado ayuda a quienes tienen hambre, a quienes necesitan ropa, a la bolsa de viaje de misioneros, a que se abran nuevas iglesias, etc. ¿Estas de acuerdo con estos 5 casos que señalo en este artículo? ¿En que otros casos crees que los cristianos estamos negando a DIOS? Dímelo en los comentarios.