Hoy más que nunca, saber diferenciarse de los demás, es un aspecto importante a tener en cuenta a la hora de buscar empleo. El currículum al que estábamos acostumbrados, generalmente creado con una plantilla de word, pasa a un segundo plano y es sustituido por nuevas formas de explicar nuestra experiencia y formación, en las que lo importante, es nuestra marca: aquello que nos define, que nos diferencia y que nos hace interesantes como candidatos.
1. Para empezar, dale un nuevo toque: y puedes hacerlo de forma muy sencilla y estando a la última. Las infografías, por ejemplo, son el último grito. Y hay herramientas que te permiten obtener unos gráficos totalmente personalizables a tu sector.
2. Si no tienes experiencia, destaca tus aptitudes y tus valores: no dejes que tu currículum se quede vacío sólo porque todavía no hayas trabajado. Destaca en él cosas que se te dan bien, logros personales que hayas conseguido, valores que te vinculen con la filosofía de la empresa a la que aplicas, etc.
3. Incluye todas las fechas: si tienes que ordenar tu experiencia o educación por cronología, recuerda siempre añadirlo de lo más reciente que hayas hecho a lo más antiguo, fechando debidamente cada etapa para que la persona de RRHH de la empresa en cuestión, pueda hacerse una idea de tu camino profesional/educativo de un vistazo.
4. Una breve presentación, puede ser algo por lo que empezar: y ojo, he dicho BREVE. Breve quiere decir que se lea rápido, en el que cuentes algo más que no sea lo que ya se ve en el resto de tu currículum, que aporte nuevo contenido y que sea sencillo, pero que diga mucho de ti.
5. Foto y datos de contacto actualizados: recuerda que si estás buscando trabajo ahora, en esta etapa vital de ahora, con esta edad, no puedes incluir una foto de cuando ibas al colegio. Revisa también que todos tus datos de contacto estén actualizados, y añade, por qué no, enlaces a tu blog o perfiles sociales como Linkedin o Twitter.
Y lo más difícil de todo: ten siempre presente que detrás de cada currículum hay una persona y por ello, detrás del tuyo debes estar tú. Tu CV tiene que reflejar quién eres y qué es lo que sabes hacer, tiene que reflejarte a ti y, por ello, no sólo debes incluir datos académicos o profesionales, sino también aptitudes, habilidades, valores, logros personales, etc. Échale un poquito de imaginación :)