Puede haber situaciones en las que vayamos a estar bastante tiempo sin utilizar nuestra bicicleta. Esto puede suceder debido a una lesión, al clima, a un período vacacional, etc.
Limpieza
Lo primero que tendremos que hacer cuando vayamos a dejar de utilizar la bicicleta durante un largo período de tiempo es limpiarla. De este modo evitaremos el desgaste prematuro de algunos de sus componentes, sobre todo la transmisión.
Lo ideal es limpiar la bicicleta con agua tibia y jabón, y posteriormente secarla bien. Tenemos que dejar sobre todo bien seca la transmisión, ya que restos de humedad en ella puede provocar óxido que deteriore los componentes.
Neumáticos
Aunque dejemos los neumáticos de la bicicleta hinchados, debemos comprobar semanalmente la presión de los mismos, sobre todo si son tubeless.
Si los neumáticos se deshinchan completamente y pasan así mucho tiempo acabarán deformándose.
Transmisión
Además de la limpieza que hemos comentado en el primer punto, es recomendable que la transmisión esté en un desarrollo en el que sus componentes no tengan ningún tipo de tensión.
Esto se consigue dejando la configuración, plato pequeño y piñón pequeño. Así los muelles tanto del cambio trasero como del desviador estarán en reposo, y el cable de acero del cambio no tendrá tensión.
Frenos
En el caso de que nuestra bicicleta tenga frenos hidráulicos, es recomendable bombearlos de vez en cuando en parado. Esto se hace para que los pistones no se sequen, ya que si esto sucede se quedarán bloqueados y seguramente tendremos que hacer una purga completa del sistema de frenado.
Horquilla de suspensión
En el caso de las bicicletas de montaña con horquillas de suspensión, es recomendable que están se queden desbloqueadas.
Si dejamos bloqueada la suspensión, el muelle del bloqueo quedará tensionado, y en esta posición durante mucho tiempo puede perder eficacia, y cuando volvamos a coger la bicicleta es posible que el bloqueo no funcione correctamente.