1. La dupla Bill Bellichick – Tom Brady
La misma razón que pudimos haber escrito hace 10 años (o más), por lo que a muchos les puede resultar aburrida, predecible y obvia, sin embargo por años se ha comprobado que mientras esta fórmula se mantenga en pie, el equipo saldrá a flote inventándose y reinventándose tan seguido como sea necesario.
Ya sea de una temporada a otra, de un mes a otro, de una semana a otra o de la primera a la segunda mitad, este equipo encuentra las maneras de ganar gracias a los planteamientos y ajustes que su Head Coach realiza. En ocasiones pueden ser no los más espectaculares, pero normalmente son muy efectivos.
A pesar de que Brady entra a la temporada con 38 años cumplidos, su dedicación a mantenerse en forma le ha permitido seguir con un nivel de élite e incluso ha mejorado en el área que claramente es su mayor debilidad, la movilidad; para prueba sólo hay que ver que el año pasado convirtió 11 primeros y diez con sus piernas, el segundo total más alto de las últimas seis temporadas, además de que se le notó con mayor disposición a salir de la bolsa de protección que en años anteriores.
Simplemente no muestra todavía ninguna señal de haber perdido un paso en su ritmo y si a eso le agregamos el hecho de que prácticamente todos sus blancos principales regresan – menos el RB Shane Vereen – podemos pensar que este año será otro bueno en términos de producción para el 12.
2. Front seven defensivo
A veces olvidamos que los orígenes de Bill Belichick están en la defensiva y que si por algo destacó al inicio de su carrera, fue por ser bastante competente esquematizando de ese lado del balón.
Este año, una vez más apelando a su creatividad y capacidad para reinventarse, deberá diseñar las cosas de forma distinta a los últimos años ante la falta de un CB dominante, ya que en los últimos años tuvo a Darrelle Revis y a Aquib Talib y este año su mejor hombre podría ser el héroe del Super Bowl, Malcom Butler.
La atención se centrará ahora en el front seven, un grupo que poco a poco pasó de ser una debilidad a una de las que parece ser una fortaleza del equipo.
En dos años consecutivos, el equipo ha seleccionado en la primera ronda un defensive tackle, primero a Dominique Easley y luego a Malcom Brown, ambos jugadores sumamente talentosos que tienen gran promesa, quienes complementados por Sealver Siliga y el veterano Alan Branch, completan el cuadro de DTs.
Por su parte, en los extremos cuentan con una colección de talento bastante interesante con Chandler Jones y Rob Ninkovich, Jabaal Sheard, Trey Flowers, Geneo Grisson, Zach Moore y Xzavier Dickson. Este grupo le permite al equipo la flexibilidad de tener un frete 4-3 o 3-4 dependiendo del rival y situación de juego.
En el siguiente nivel, sus tres titulares en la posición de linebacker son de lo mejor que hay como grupo con Jerod Mayo, Jamie Collins y Dont’a Hightower. Los tres jugadores ofrecen fortaleza, agilidad y velocidad para llegar al balón.
3. Rob Gronkowski
Sin duda un jugador que cuando está en el campo es completamente dominante, incluso me atrevería a colocarlo como uno de los tres jugadores que más lo son en toda la NFL (acompañado por JJ Watt y Aaron Rodgers).
El problema que ha tenido a lo largo de su carrera ha sido mantenerse sano, de 96 partidos posibles en sus cinco años de carrera, sólo ha participado en 65. Sin embargo, cuando está disponible su producción, y también la del equipo, son realmente notorias. El año pasado, en los primeros cuatro partidos de la temporada, participó en menos de la mitad de las jugadas de la ofensiva mientras se recuperaba de una cirugía en la rodilla, además de no ver acción en el último partido de la temporada regular contra Buffalo; en esos cinco partidos los Patriots promediaron 17.8 puntos y tuvieron un récord de 2-3, mientras que en los otros 14 partidos (incluyendo Playoffs), promediaron 34.8 puntos y registraron récord de 13-1.
Por si fuera poco, la profundidad en la posición de TE es buena, debido a que la presencia veterana de Michael Hoomanawanui y el refuerzo recién llegado de Scott Chandler, le permitirá al Coordinador Ofensivo, Josh McDaniels, usar la creatividad en los sets de dos tight ends.
4. Competencia en la AFC
Sin duda los rivales de la división Este de la AFC se reforzaron con talento de buen nombre con jugadores como Ndamukong Suh, Brandon Marshall, Darrelle Revis y LeSean McCoy, por mencionar algunos, sin embargo cada uno de esos equipos tiene huecos que se pueden señalar con facilidad y que Bellichick se encargará de explotar.
Saliendo de la división y fijándonos en toda la conferencia, nos damos cuenta de que no hay un equipo que luzca completamente dominante. El par que sobresale, Colts y Steelers, sufre del mismo mal, una defensiva sólida que les permita mantenerse en el partido.
Aunque las probabilidades de llevarse el décimo tercer título de la división en la era de Bill Bellichick es alcanzable, encaso de obtenerlo, entrar a Playoffs como Comodín tampoco será tan complicado.
5. Factor motivación
Los Pats son especialistas en mandar mensajes a la liga por medio de su juego. Tras un offseason ene l que se vieron envueltos en uno de los más grandes (y sobre dimensionados) escándalos de la historia de este deporte, la atención del equipo entero estará puesta en demostrar que los PSI de un balón no son un tema relevante para su competitividad.
Los principales protagonistas, el QB Tom Brady y el Head Coach Bill Bellichick, usarán el Deflategate como gasolina para avivar el fuego de su competitividad (que ya de por sí es mucha).
Si pudieron anotar 28 puntos sólo en la segunda mitad del Juego de Campeonato de la AFC la temporada pasada con balones que habían sido vueltos a revisar por lo oficiales, pueden hacerlo de nueva cuenta esta temporada en el momento en el que se lo propongan.
El fuego está vivo y las críticas lo están atizando.