5 razones por las que no debes participar del NaNoWriMo

Publicado el 31 octubre 2016 por Pipervalca
Noviembre es especial por muchas razones. Se celebra el cumpleaños del Monstruo de las Galletas; se celebra el día del sándwich, de las donas, de los dulces, del pan hecho a mano; este noviembre Donald Trump podría ser presidente; se celebra el día del baloncesto, el día de los rayos X y hasta el día de quedarse en casa sin estar enfermo. Pero lo más importante es que es el Mes Nacional de la Escritura de Novela, que en pocas palabras significa… NaNoWriMo. Escribir una novela en 30 días.

Este de seguro no va a participar. 


Durante el NaNoWriMo, los que nos catalogamos escritores enfrentamos nuestro mayor miedo: sentarnos a escribir. Es verdad, nos jactamos gritando al mundo que somos escritores; abrimos cuanta red social existe (ya hasta para ser escritor dizque debo poseer una cuenta en Instagram); creamos hermosos blogs literarios, transfiguramos en expertos reseñistas empíricos y no nos perdemos presentaciones de libros, ferias de libros, ventas de libros y quemas de libros. Hacemos de todo como escritores menos escribir.
Ojo, no hablo de esos pocos, extraños y legendarios personajes que sí escriben. Esos que dedican día a día de su vida al arte sobre una rutina establecida. Para ellos este mes es como cualquier otro mes del año: un reto. Para este reducido grupo participar no cambiará en nada sus vidas. No. Estoy hablando de los que como yo aún no nos decidimos a dar ese primer paso sobre la luna. Damos vueltas y vueltas sobre el transbordador espacial y de vez en cuando nos asomamos a ver la superficie del satélite diciendo que somos astronautas. Esos que escribimos un cuentico de vez en cuando y que poseemos el secreto para ser un un nobel pero que por alguna extraña razón no lo compartimos ni lo usamos. Esos que desde hace unos días le venimos sacando el cuerpo al NaNoWriMo.
Esta entrada va dedicada a los seudoescritores. A los que han permitido que su «yo negativo» tome el control. Un yo que justifica el por qué no han alcanzado sus objetivos y que siempre tienen un pretexto, bastante convincente por cierto, para huir al reto de escribir durante 30 días 50.000 palabras. Va dedicada a ese Piper Valca, representante de una mayoría que dice ser escritor pero en realidad no escribe. Solo habla.
Las razones que daré a continuación no son excusas. Son las explicaciones que soportan tu decisión de no participar del NaNoWriMo.

No tienes tiempo

Seamos honestos, eres de esas personas de la nueva generación. La que apenas tiene tiempo para levantarse a las diez de la mañana, desayunar y sobrevivir a la jungla del siglo XXI. Tienes una agenda demasiado apretada como para agregarle una responsabilidad que no tiene razón de ser. Debes verte la nueva temporada de The Walking Dead, participar en cuanto foro de Marvel y Harry Potter existe, revisar las redes sociales cada cinco minutos, dormir un rato, dormir otro rato y ver el atardecer desde una montaña mientras lloras tu falta de tiempo. Eres tan ocupado que no concibes cómo escribir 1667 palabras cada día. Eso es para los desocupados. No para ti. ¿Procrastinar? Ni cuando estabas en el útero de tu madre lo hacías. 

Ya lo intentaste antes y no te fue bien

De las experiencias se aprende. Como cuando participaste en la clase de química y te equivocaste. Jamás volvieron a escuchar tu voz. Si el año pasado te pusiste de atrevido en el NaNo y apenas lograste llegar a la mitad, no hay razón para volver a pasar por ese mal rato. No. Tu ser deseoso de autoestima no permitirá una frustración más. Quizás es mentira eso de que se alcanza a llegar a las 50.000 palabras en un mes. Igual, te puedes dar por bien servido con la experiencia, pues como dice un técnico de fútbol en Colombia: perder es ganar. 

Para el próximo año

Estás joven y con toda una aventura por delante. ¿Por qué complicarte ahora la vida con pequeñeces como eso del NaNoWriMo? Si no has participado en los años anteriores no hay afán a hacerlo este. Quizás para el próximo te sientas más motivado o lo que sea que pase por tu cerebro. Un año más, un año menos. Que se jodan los que están esperando desde hace siglos la publicación de tu aclamada pero efímera obra maestra. Que se jodan hasta noviembre del 2017… o del 2018. Un año más, un año menos.

No escribes bajo presión

Es verdad. Nada más incómodo que plazos y tiempos para escribir. No es natural del proceso de escritura. Nada mejor que sentarse a hacerlo cada tres días, después de que ponga la vaca entre el solsticio de invierno y el de verano. O cada que se cae la Internet y no hay Netflix ni televisión por cable. ¿Y qué si no escribes más que cinco renglones en cada sentada? Hay veces en que no fluyen las ideas y no se puede presionar a la musa. Es la ley de la escritura. Sentarse debajo de un árbol a esperar ese chi interior que te impulsa a escribir. ¿30 días para escribir? Pamplinas. ¿Escribir obligado? Jamás.

Eres demasiado bueno para eso


Has analizado el NaNoWrimo y has comprendido una de los mayores secretos de este reto anual: se valora la cantidad y no la calidad. ¿Tú, el escritor del momento en tus sueños, escribiendo algo de escaso valor literario? Jamás. Qué pensarán los 1.5 K seguidores de Twitter. Además, si escribes a la carrera después vendrá el tormentoso proceso de edición y no estás para eso. Cada letra que eyacule tu lápiz debe valer oro puro y no te puedes permitir participar en un reto que solo busca exigirte al máximo para tener que pasar el doble del tiempo borrando y reescribiendo. ¿Hay alguna lógica en eso? Ninguna. Que editen los editores que se lucrarán contigo. Tú escribes.

¿No te gustó? Entonces, escribe


Quizás te estás imaginando que eso no sucede contigo y que no lo haces porque no te da la gana, no te llama la atención o no te sientes motivado. No importa, cada quien es libre. Sin embargo, debes tener presente varias cosas: las redes sociales no te harán escritor, los libros sobre escritura, motivación y mercadeo no te harán escritor, leer montañas de libros no te hace escritor. Eres tú y solo tú. Tan solo venciendo a ese monstruo interno lo lograrás. Es fácil. El secreto para ser escritor es simple, siéntate a escribir y lo descubrirás.Y si te decides de una vez por todas a participar del NaNo, que la rutina se arraigue en tus entrañas y sientas el deseo de escribir los doce meses del año. No solo en noviembre, recuerda que en este mes también cumple años el Monstruo de las Galletas.