Las relaciones amorosas son complicadas. Cuando conocemos a nuestro compañero de viaje, la persona que nos hace feliz y nos apoya incondicionalmente, todo se vuelve ilusión y pasión. Tenemos al lado a la persona que queremos, a la persona por la que sentimos amor y, esto, nos hace sentir que estamos en la cima de la pirámide.
Sin embargo, las relaciones pueden terminarse por muchas y complicadas razones. A veces por el simple desgaste y otras por problemas más complicados, la situación se torna insostenible y termina rompiéndose.
Ante esta pérdida de un ser querido es normal sentir tristeza y soledad. Parece como si todo dejara de tener sentido y nos sentimos perdidos, sin saber cómo encauzar nuestra vida. Esta etapa puede llegar a ser muy dolorosa para una persona que se siente unida a su pareja, por eso debe saber cómo superar la ruptura de pareja.
El sentimiento de malestar es muy diferente si te dejan o si dejas, pero a la larga, ambas personas acaban sufriendo las mismas necesidades al empezar una nueva etapa. Esta crisis post-ruptura debe intentar afrontarse de forma sana y, a ser posible, rápida. Y digo rápida porque cada uno tiene que tomarse el tiempo que necesite para reconstruir su vida. Es normal sufrir ante esta situación, pero cuanto antes lo superemos, mejor.
Si te encuentras en esta situación y te sientes perdido y triste, te recomendamos que leas atentamente estos 6 consejos para superar una ruptura de pareja.
1. Haz una limpieza en tu vida. Todos los cambios tienen algo positivo. Ahora es el momento de hacer una limpieza y sacar de tu vida todo aquello que no te hace sentir feliz. Para ello, puedes comenzar por algo sencillo. Haz limpieza en casa y tira todos los trastos inútiles que desearías no ver más o las camisetas del armario que hace años que no te pones. Pero sobretodo, deshazte de las cosas que te recuerdan a tu ex pareja.
2. Elimina el contacto. Si cada vez que tu ex pareja te escribe o te llama, te hace entrar en un estado de ánimo que no te favorece nada, la solución es sencilla. Borra su teléfono, bloquea su perfil en las redes sociales y, por su puesto, deja de investigar con quién sale y con quién entra. Ya no forma parte de tu vida, por mucho que te duela.
3. Acepta la situación en la que te encuentras. Cuanto antes aceptes que ya no estás con esa persona, antes empezarás a rehacer tu vida. A veces, nos enganchamos al pensamiento de la posibilidad de volver y nos negamos a avanzar. Esto es un error que te impedirá salir de esta crisis, sobretodo si la otra persona ya está rehaciendo su vida y no queremos asumirlo.
4. Habla de ello. Expresar nuestras emociones es una buena forma de desahogarnos. Por eso, quizás necesites hablar de cómo te sientes con una persona de confianza. Eso sí, no monopolices todas las conversaciones con la relación y te machaques pensando qué pudo salir mal. Esto no hará más que empeorar las cosas.
5. Haz planes. Aunque parezca sencillo, cuando nos encontramos en un estado de bajón nos cuesta mucho hacer planes. Siempre encontramos la excusa perfecta para quedarnos en casa o evitar compromisos. No caigas en esta rutina. Una vez pasado el duelo por la pérdida de tu pareja, debes forzarte a continuar con tu vida. Sal con tus amigos, visita a tu familia o simplemente comienza a realizar actividades de ocio que te entretengan. Verás como así, empiezas a sentirte mucho mejor.
6. Cuídate. Este consejo es fácil que se nos olvide, pero es muy importante para que te sientas bien ante una situación así. Por ello, comienza a hacer deporte. Si no tienes costumbre de realizar ejercicio, puedes empezar por dar paseos de 30 minutos cada día. Te sentirás mejor contigo mismo y eso se nota. Además, puedes aprovechar para darte un capricho. Un corte de pelo o un masaje son pequeños obsequios que te agradarán el día.
En resumen, estos consejos que te damos ayudan a favorecer una relación sana contigo mismo. Conocerte mejor, ahora que no tienes pareja, o aprender a pasar tiempo contigo mismo sin la necesidad de depender del otro, son actitudes que te favorecerán a corto y a largo plazo. Para reforzarlo, debes mejorar tu autoestima y sentirte seguro de ti mismo, centrarte en otras parcelas de tu vida, como el trabajo, las amistades o la familia, y sobretodo pensar en ti y no en tu ex pareja.