7 consejos para sobrevivir a la depresión (postparto)

La depresión postparto suele darse en las primeras semanas y puede aparecer hasta un año después de haber nacido el bebé. Es diferente en cada persona tanto los síntomas como el tratamiento y el curso de su recuperación. No hay un tiempo establecido para recuperarse de ello. Algunas veces el camino es corto, otros son más largos y necesitan de ayuda para llegar a la recuperación, pero se llega.

Hay muchos factores que pueden afectar a la recuperación de una depresión (postparto). Por eso cada persona tiene su propio camino que durará un tiempo diferente. No hay un límite establecido para su duración.

¿Cómo de rápido me puedo recuperar?

Hay algunos factores que pueden afectar a la rapidez de la recuperación, como por ejemplo:

• La intensidad de la depresión (postparto): cuanto peor sea tu depresión o ansiedad más tardarás en mejorar.
• Cuando tiempo lo has dejado estar hasta pedir ayuda. Cuanto más tiempo haya pasado, más difícil será.
• Lo bien que te vaya el tratamiento. A veces es difícil dar con el antidepresivo que le funciona a tu cuerpo, así como la terapia o el terapeuta se pueden adaptar más o menos a tus necesidades.
• Problemas de salud mental anteriores.

No trates de ser perfecta. Tú siempre serás la única madre para tu bebé. Tu proceso de recuperación es personal y no deberías compararte con nadie mientras estés en ese camino (ni después en realidad). Imponerte presión a ti misma no va a ayudar a que llegue antes. Haz lo que esté bien para ti y no te preocupes por los demás. La recuperación es posible.

¿Podré recuperarme?

Vas a necesitar un tratamiento. Estas cosas no se van solas por arte de magia ni con voluntad. Tus síntomas necesitan un tratamiento, apoyo y mucho autocuidado. Puede que a veces te sientas sola y pienses que jamás te vas a recuperar. Te preguntarás que cómo sé que piensas eso. He estado en tu lugar.

7 Consejos que pueden ayudarte

Te dejo algunos consejos que pueden ayudarte durante la recuperación de tu depresión:

1. Toma descansos de “ser mamá”: 

   Si, ahora eres madre, pero sigues siendo tú. Busca a alguien que pueda hacerse cargo del peque/los peques para poder tomar un descanso. La clave es hacer algo que te guste hacer. Sé que probablemente tienes una lista de cosas por hacer (como lavar ropa, casa, platos, ordenar habitaciones, etc…) pero no me refiero a ese tipo de cosas.
   ¿Tienes un hobby que has dejado apartado este tiempo? ¿Un libro para leer? ¿Una serie que ver tranquilamente? ¿Un blog que actualizar? Yo suelo usar mi tiempo de no-madre en este chibimundo

   Simplemente asegúrate de que ese tiempo es realmente para ti.

2. Escribe sobre tus sentimientos y pensamientos:

   Esto ha sido la salvación para mi. Es genial poder sacar todo fuera y sacar todo lo negativo que has ido acumulando. Además me he dado cuenta de que cuando lo releo soy capaz de ver que las cosas no son tan malas. Al escribir y leer parece que ves las cosas de forma más racional  y eso ayuda a ser más objetiva.
   Como sabes suelo escribir sobre mi depresión y mi recuperación en el blog. Me reconforta pensar que puedo estar ayudando a otras personas en la misma situación. También conocer a otras personas pasando por lo mismo me ayuda a mí.

   Así no me siento sola.

3. Dile a otras personas que padeces depresión:

   Lo sé. Sé que no es fácil dar este paso. Pero léeme. Decirle a las personas a las que quieres y en las que confías cómo te encuentras día a día puede hacerte la vida más fácil. Yo se lo he contado a mis amigos cercanos y a mi familia. De esta forma no tenía por qué fingir cuando estaba mal. Aunque he de decir que he fingido mucho en estos últimos años para no hacer daño a los demás. Además contaba con su ayuda, sólo tenía que pedirla. A través de este blog se lo he contado a muchas más personas.

   Eso me ha ayudado a que las personas entendieran que dejara el blog o las RRSS en stand by por un ingreso.

4. Ten una conversación sincera con tu pareja:

   Hablar con tu pareja sobre cómo te sientes después de haber tenido un bebé puede no resultar fácil. Puede que la otra parte no entienda por qué estás cambiada. O por qué eres diferente. De todas maneras sigue siendo la mejor opción. Simplemente habla de tus sentimientos y lo que te pasa por la cabeza. Explica que sabes que necesitas ayuda profesional y la suya también.
   Puede que te encuentres con que la otra parte te agradece tu sinceridad. Es posible que pensara que había hecho algo para tenerte así, culpándose. Las conversaciones sinceras en pareja son siempre complicadas.

   Airear los sentimientos y pensamientos no es fácil, pero vale la pena.

5. Deja que te ayuden:
   

   No tengas miedo de aceptar ayuda. No significa que seas una mala madre. Más bien, se requiere de fortaleza para saber cuando una necesita ayuda y pedirla. Para mi esta ha sido la lección más dura de aprender. Además es bueno que tus peques vean que cuando necesitan ayuda pueden pedirla. Predica con el ejemplo. Así que si alguien te trae comida, lava tus platos o te hace la colada no te agobies.

   Toma la ayuda que te ofrezcan.

6. Ve a todas las citas médicas:

   Durante la recuperación, incluso si ya te sientes bien, es vital seguir yendo a las citas médicas. El contacto con tu equipo médico es importante porque mientras te estás recuperando tu plan de tratamiento puede necesitar ajustes. Es posible que los medicamentos no te funcionen del todo bien o que haya que retirarlos poco a poco según te sientas mejor. Además te da una oportunidad para hablar con alguien sobre las preocupaciones que puedan aparecer durante la enfermedad.

Duerme cuando el bebé duerma.

¿Cómo sabré si me estoy recuperando?

Algunos de los signos de que te estás recuperando de una depresión (postparto) son estos:

• Vuelven a tí tus sueños y ambiciones. Mientras te vas recuperando volverás a hacer planes de futuro y planes. Puede que desear reincorporarte al mundo laboral o retomar algún antiguo hobby.
• Empezarás a encontrar felicidad en las pequeñas cosas. Un día soleado de primavera, la sonrisa de tu peque o comprar un aperitivo que te guste.
• Tu concentración mejorará. Podrás pensar más claramente y desechar los pensamientos negativos sin problemas. La niebla mental se va haciendo que sea más fácil pensar.
• Tu personalidad vuelve a ti. Empezarás a hacer de nuevo las cosas que siempre te han gustado y serás capaz de reirte y disfrutar del tiempo con tus seres queridos.

No es imposible recuperarse de una depresión postparto pero si es muy importante tener un plan de tratamiento y hacer lo que esté en tu mano por la recuperación.