7 Cosas que los cristianos dicen y asustan

Por Inevitability

Todos sabemos que al entrar a una congregación es entrar a otro mundo y cuando conocemos a Dios nuestro amor por Jesús es tan grande, que tomamos toda la cultura de la congregación, aún cosas que no están en la biblia (aunque eso es motivo de otros artículos).

El caso es que muchas veces adquirimos un vocabulario, o nos acostumbramos a ciertas frases, que si somos sinceros, para personas que no se mueven en nuestro contexto congregacional pueden llegar a ser muy aterradoras, toma este artículo con mucho humor, he aquí las 7 Cosas que los cristianos dicen y asustan:

#1. Cúbrete con la sangre de Cristo

Piénsalo por un momento, fuera del contexto, sangre, cubrirse, suena más a escena de película de terror que un acto espiritual.


#2. El Espíritu Santo estará contigo

Así es, aún en aquellos momentos en la noche en que estás solo de camino a la cocina, en aquel oscuro pasillo por el cual corres, el Espíritu Santo estará contigo, ahora creo que a los de habla inglesa les toca peor porque ellos usan la expresión “Holy Ghost” y “ghost” al español traduce “fantasma”.


#3. Vamos a orar porque yo creo que tu caso requiere liberación

Sin comentarios, solamente la imagen de todas las películas del exorcista, o en su defecto de sus afiches y cortos vienen a la mente.


#4. Hay torrentes de aguas que se están derramando sobre este lugar 

Ok, si alguien escucha esto en cualquier otra situación creo que lo primero que van a hacer es buscar la salida de emergencia.


#5. Bienvenido a la familia de Dios

No es por nada, pero si me dicen eso con voz ronca, suave y un acento italiano me voy a asustar un poco, escenas de la película el padrino vendrían a la mente.


#6. Hay muchas personas que aunque tiene apariencia de que viven, están muertos

Si estoy en un auditorio cerrado espero de todo corazón que esos muertos vivientes no estén en este lugar


#7. Ahora vamos a orar para que descienda el fuego del Espíritu Santo

Huye.

Y a ti, ¿se te ocurre alguna otra?

¡Dios te Bendiga!