80 cumpleaños de Francisco Ibáñez, maestro español de la historieta

Publicado el 15 marzo 2016 por Olivia

Hoy cumple 80 años Francisco Ibañez, dibujante y guionista de historietas. Autor de Mortadelo y Filemón, 13 rue del Percebe, el botones Sacarino e infinidad de personajes que nos han hecho reír y amar la lectura a varias generaciones.
Y como también es el cumpleaños de Bruno, mi hijo mayor, quiero compartir un entrañable momento vivido por mi familia que nos regaló el maestro de maestros hace pocos años.
Resulta que tanto mi marido como yo crecimos leyendo tebeos de editorial Bruguera. Somos grandes amantes del cómic, tanto de la historieta clásica, las tiras humorísticas como de la novela gráfica. Afición que estamos orgullosos de haber transmitido a nuestros hijos.

Hace cuatro años, mi hijo Bruno quiso tener algún Mortadelo dedicado por el gran Ibáñez. Tiré de contactos y escribí a Marisa Tonezzer, editora romántica de Ediciones B que muy amablemente me puso en contacto con el editor de Francisco Ibáñez. Por él supimos que firmaba ese año en Madrid, Valladolid y Barcelona. Por comodidad, mi hijo decidió ir hasta la capital. Un viaje que en principio iba a realizar él solo. Pero cuando mi marido lo oyó comentarlo, enseguida se brindó a llevarlo en coche. Obviamente, yo sabía que el ofrecimiento escondía su ilusión también de tener sus tebeos firmados por Ibáñez.
Padre e hijo fueron a Madrid, mano a mano. Y ese domingo, en la Feria del Libro, cayó un chaparrón de los que hacen época. Allí aguantaron los admiradores con una paciencia estoica bajo la lluvia, ya que el maestro dedica tanto tiempo a cada uno de sus lectores que tarda una hora de reloj en firmar los tebeos de 10 personas.
Cuando les llegó el turno a mis chicos, Francisco Ibáñez se emocionó al ver que mi marido había llevado desde Valencia tebeos de los años 80 de la extinta editorial Bruguera (cuyo testigo, afortunadamente, recogió Ediciones B).

Y si comerlo ni beberlo, se convirtieron en noticia al llamar su presencia la atención de las cámaras y micrófonos de Antena 3 que cubrían la Feria.
Cuando le preguntaron a Ibáñez qué sentía al ver ante él a un padre y un hijo con sus respectivas colecciones de tebeos de varias décadas, éste respondió "Este es el mejor pago a mi trabajo, el mejor premio que me pueden dar, que un padre y su hijo recorran 750 Km para que les firme mis historias y que las conserven durante tantos años con este cariño".
Esa es la humildad de los grandes, su grandeza humana es pareja a su inmenso talento. ¡Felicidades, maestro, y gracias regalarnos tantos y tan buenos momentos de lectura!