9 cosas que las personas felices y exitosas eligen ignorar

Por Juan Carlos Valda @grandespymes

El presidente y co-fundador de una organización benéfica local que cuida a las personas sin hogar en nuestra área es un artista, músico, tatuador de 38 años de edad, que está cubierto de pies a cabeza con tatuajes y piercings, y tiene largas rastas marrones que cuelgan por debajo de su cintura.

Está al frente de la obra de caridad desde que tenía 20, y ha ayudado a cientos de personas a volver a ponerse de pie, incluyendo a una mujer que conozco personalmente y que ahora es una exitosa emprendedora.

Acabo de tener una corta e inspiradora conversación con este improbable héroe hace unos minutos, y ahora estoy sentado aquí pensando en las decenas de personas felices y exitosas que conozco como él, que hacen caso omiso de los estereotipos, la negatividad y los detractores, y van y marcan la diferencia al hacer las cosas a su manera ... la manera correcta.

Y seguir sus pasos tampoco es tan difícil; sólo tienes que empezar a ignorar...

1. Los juicios de otras personas.

Está bien escuchar a los demás, pero no a costa de tu propia intuición. A lo largo de tu vida, habrá muchos momentos en los que el mundo se pondrá muy tranquilo y lo único que quedará será el latido de tu propio corazón. Así que es mejor que reconozcas ese sonido, de lo contrario, nunca entenderás lo que te está diciendo.

Cuando pasas mucho tiempo enfocado en la percepción que los demás tienen de ti, o en quien los demás quieren que seas, eventualmente olvidas quien realmente eres. Así que no temas los juicios de los demás; ya sabes en tu corazón quien eres. No tienes que ser otra persona para impresionar e inspirar a las personas. Deja que se impresionen e inspiren con tu verdadero TÚ. Honestamente, ¿qué importa la vida si te pierdes a ti mismo en el camino? Incluso tus mentores deben enseñarte CÓMO pensar, no QUÉ pensar. Así que si alguien (cualquier persona) está menospreciando tu verdad, puede que sea momento de date la vuelta e ir por otro camino.

2. Los problemas del pasado.

No puedes cambiar lo que ya pasó, así que elige mirar hacia adelante en lugar de hacia detrás. No te estreses. Haz tu mejor esfuerzo. Olvídate del resto. Tus errores del pasado son para guiarte, no para definirte. La vida es un hermoso círculo. Eres fuerte, porque conoces tus debilidades. Eres sabio porque fuiste necio. Puedes reír ahora, porque conociste la tristeza.

Es loco como siempre terminas donde estás destinado a estar; cómo incluso las situaciones más trágicas y estresantes eventualmente te enseñan lecciones importantes que nunca soñaste que ibas a aprender. Recuerda, la mayoría de las veces cuando las cosas se caen a pedazos, en realidad están cayendo en su lugar. Sólo porque hoy no estás donde quieres estar, no significa que no vayas a estar allí algún día. Todo tendrá sentido; tal vez no hoy, pero con el tiempo. (Angel y yo hablamos sobre esto en el capítulo "Adversity" de 1,000 Little Things Happy, Successful People Do Differently.)

3. Las pequeñas frustraciones de cada día.

Un mal día es simplemente un mal día. Viene y se va. Elige no hacer que sea algo más. Descubrirás que es necesario dejar a algunas cosas ir por la sencilla razón de que están añadiendo un peso innecesario a tu corazón y a tu alma. Sigue adelante y déjalos ir. No encadenes tus propios tobillos. Es increíblemente fácil disfrutar más de tu vida en este momento, no importa cuál sea tu situación. Es sólo cuestión de deshacerte de las capas de tonterías que te están tirando para abajo.

Detrás de cada hermoso día, ha habido algún tipo de lucha. Te caes, te levantas, cometes errores, vives, aprendes. Eres humano, no perfecto. Has sido herido, pero estás vivo. Piensa qué precioso privilegio es estar vivo hoy; para respirar, para pensar, para disfrutar, y para perseguir las cosas que amas. A veces hay tristezas en tu viaje, pero también hay un montón de belleza. Debes seguir poniendo un pie delante del otro, incluso cuando te duela, por que nunca sabrás lo que te espera a la vuelta de la esquina.

Haz estas cosas diariamente y estarás bien:

1. Piensa positivamente.
2. Come sano.
3. Ejercita hoy.
4. Preocúpate menos.
5. Trabaja duro.
6. Ríe a menudo.
7. Duerme bien.

Repite...

4. El necesario dolor del trabajo duro y del crecimiento.

Hay dos tipos de dolores en la vida: el dolor que te hace daño, y el dolor que te cambia. Pero cuando aprendes de ello, ambos son uno y el mismo. Si quieres algo, debes soportar el dolor de trabajar por ello. Es así de simple. Si no estás donde quieres estar en este momento, tómate el tiempo para visualizarte a ti mismo en el lugar en el que quieres estar y da el primer paso en esa dirección. Puede que no seas capaz de cambiar tu destino en un día, pero sí puedes cambiar la dirección a la que te diriges ahora mismo.

Recuerda, la fuerza no proviene de lo que puedes hacer. Proviene de superar las cosas que no podías hacer. Las situaciones difíciles crean personas fuertes y exitosas. No importa lo mucho que duela ahora, tiene que mantener la cabeza en alto, apretar los dientes y seguir adelante. Al final, la constante acción hablará por sí mismo. Así que enfócate diligentemente, trabaja duro en silencio, y deja que tu éxito sea tu ruido.

5. Los trabajos inútiles e insignificantes.

Al principio, le tendrás que decir "sí" a muchas cosas para poder descubrir y establecer tus metas. Luego, tendrás que decirle "no" a muchas cosas y concentrarte en tus metas. Deja de sobre-comprometerte y tratar de hacer demasiadas cosas a la vez. Comienza a decir "no" más a menudo. Si nunca dices "no", tendrás demasiadas cosas para hacer y todo lo que lograrás es estrés y frustración.

Como Bruce Lee dijo una vez, "No es un aumento diario, sino una disminución diaria. Deshazte de las cosas que no sean esenciales." Muchos de nosotros pasamos demasiado tiempo en lo que es urgente y no suficiente tiempo en lo que es importante. No seas uno de ellos. Nuestras prioridades no son las cosas que decimos, sino la forma en que gastamos nuestro tiempo cada día lo que revela la verdad. Deja que tus acciones cotidianas reflejen tus más altas prioridades. (Lee The 7 Habits of Highly Effective People.)

6. Los pensamientos impacientes.

La paciencia no es sobre esperar; es la capacidad de mantener una buena actitud mientras trabajas duro por lo que crees. Es la voluntad de mantenerte enfocado, la confianza de dar un pequeño paso a la vez, saber que la forma de mover una montaña es mover una piedra a la vez. Cada piedra que muevas, no importa cuán pequeña sea, será un progreso.

Ya sea que estés trabajando en mejorar tu salud, aprender una nueva habilidad, o levantar un negocio del suelo, no puedes esperar gratificación instantánea. En lugar de eso, dedícate a dar lo mejor de ti y entiende que los cambios verdaderos toman tiempo. A veces, puede que sea difícil ver tu progreso. A veces, será frustrante cuando los resultados que buscabas no aparezcan tan rápido como esperabas. Aún así, estás avanzando. Aguanta. Puede que estés moviendo las cosas muy lentamente, pero sigues moviendo una montaña.

7. Las cosas que no pueden ser controladas.

Nunca fuerces nada. Haz tu mejor esfuerzo, y entonces que sea lo que sea. Si tiene que ser, será. No te sientas mal por las cosas que no puedes controlar. Deja de hablar sobre el problema y empieza a pensar en la solución. Olvídate de lo que podría salir mal por un segundo y piensa en lo que ya está bien.

Recuerda, los cambios pasan por una razón. Rueda con ellos. No será ideal ni fácil al principio, pero valdrá la pena al final. Cuando los tiempos son buenos y todo está cómodamente en orden, es fácil caer en la complacencia y olvidar lo hábil e ingenioso que eres capaz de ser. Los problemas no anticipados son males necesarios que te empujan hacia adelante, porque eventualmente terminan, pero las lecciones y el crecimiento que obtendrás de ellos durarán toda la vida.

8. Los temores infundados.

La vida se trata de superar el miedo y asumir riesgos. Si no tomas riesgos, no sabrás de lo que eres capaz. Si no arriesgas nada, lo arriesgas todo. A decir verdad, nada en la vida es para temerle, es para ser entendido. Ahora es el momento de ampliar tu zona de confort para poder experimentar cosas y entender más... y así puede que temas menos en el largo plazo.

La verdad, por supuesto, es que todos tenemos miedo de vez en cuando. No se trata de no tener miedo, sino de qué haces cuando te sientes así. Cuando sientas dudas, miedo, ansiedad o frustración, sabe que puedes dejarlo ir con tanta seguridad como puedes sacar tu mano de las llamas. Mantén tu mente enfocada en la bondad, en las posibilidades y en tus metas más preciadas. Lo que empieza en tu mente acaba en tu vida. Piensa continuamente de la manera que te gustaría ser, deja que estos pensamientos conduzcan tus acciones, y tu realidad se adaptará a tu forma de pensar. (Lee Daring Greatly.)

9. La interminable corriente de dudas de tu mente.

Cree en ti mismo en los tiempos difíciles. Cree en tu capacidad de tener éxito. Cree que tus relaciones valen la pena el esfuerzo. Cree que la gente comete errores en su camino hacia la grandeza. Cree que la gente puede ser tonta e inteligente, egoísta y generosa, y estresada y feliz al mismo tiempo. Cree que muy pocas personas lastiman a otras a propósito. Cree que hay muchos caminos hacia lo que es correcto. Cree en tu intuición, especialmente cuando tengas que elegir entre dos caminos buenos. Cree en que las respuestas están ahí fuera esperándote. Cree que la vida te sorprenderá una y otra vez. Cree que el viaje es el destino. Cree que todo vale la pena.

O como Roald Dahl dijo una vez: "Y, sobre todo, mira con ojos brillantes todo el mundo que te rodea, porque los mayores secretos se ocultan siempre en los lugares más inverosímiles. Aquellos que no creen en la magia, nunca la encontrarán."

Publicado originalmente en MarcAndAngel.com