La verdadera historia de Bruce Lee está plagada de una serie de desafíos que hacen de su vida, una historia digna de contar, ya que es un gran ejemplo de superación e inspiración para toda aquella persona que desee llegar muy lejos.
A menudo se piensa que Bruce Lee es tan sólo aquel personaje que hizo extender la fama de las artes marciales por todo el mundo. Pero hubo varios episodios de su vida que realmente son dignos de un verdadero luchador.
Su habilidad y destreza no solo se extendían en los sistemas de lucha, sino también en su tenacidad y dedicación en todo aquello en lo que estaba enfrascado. He allí uno de los grandes secretos de su enorme éxito y posterior leyenda.
Pero puede que existan varias cosas que no sabes de la vida de Bruce Lee y que con gusto estaré dispuesto a relatarte:
1) Su verdadero nombre era Lee Jun Fan (Protector de San Francisco). Nació en el año y día del Dragón, un 27 de Noviembre de 1940. Su madre era muy supersticiosa, por lo que le puso un sobrenombre llamado El Pequeño Fénix, el cual era realmente un nombre femenino. Esto con el fin de confundir a los malos espíritus que roban al primer varón en la oscuridad.
2) Su padre era un actor de teatro y cine. Esto le permitiría entrar de lleno en el mundo del cine con tan sólo seis meses de edad, en una película china llamada “Golden Gate Girl”. La cual, sería la primera de una larga serie de películas en las que formaría parte del elenco de actores.
En muchas de ellas, Lee ya mostraba el carisma, encanto y lenguaje corporal que caracterizaría en sus películas más conocidas, y del que estamos acostumbrados a ver.
3) También se puede decir que era un excelente bailarín, ya que ganó un campeonato nacional chino de cha-cha-cha.
4) A los 18 años, Bruce Lee se traslada desde China a Estados Unidos, en donde empieza trabajando como ayudante de cocinero para pagarse su carrera de Filosofía en la Universidad. Es por ello que empieza a interesarse por la enseñanza de filósofos como Hegel, Marx, Krishnamurti, Spinoza, entre otros. Los cuales, ejercerían una notable influencia en Él, así como también marcarían su intención de formar su propia filosofía personal y de la vida misma. Bruce Lee era también todo un filósofo.
Aún cuando no pudo terminar su carrera, esto no le impidió insistir y seguir adelante hasta lograr el triunfo.
5) También era un ávido lector. Llegó a leer mucho, inclusive a escritores de renombre en el campo del desarrollo personal, como Napoleón Hill o Norman Vincent Peale, entre otros.
Además, había escrito innumerables notas e incluso, publicó un libro titulado “Chinese Gung Fu: El Arte Filosófico de la Defensa Personal”.
6) En 1970, se lesionó un nervio de la espalda mientras hacía ejercicios con unas pesas. Estuvo confinado 6 meses en una cama, y los médicos le aseguraban que no volvería a practicar artes marciales. Fue uno de los mayores desafíos de su vida.
Pero Bruce empezó a entender el potencial de la mente en el cuerpo humano, y superó su trágica situación gracias a su fantástica actitud mental. Él creía fervientemente que nuestros pensamientos crean nuestra realidad.
7) A pesar de que el dolor de espalda lo acompaño por el resto de su vida, logró impresionar al público y a los productores de Hollywood por su increíble rapidez y agilidad.
8) Tuvo que superar grandes fracasos como la de la serie “The Green Hornet”, o ser rechazado para el papel principal en “Kung Fu”, por su ascendencia china.
Aún así, fue a China y se convirtió en un héroe nacional, así como un actor de cine con fama internacional. Fama que haría que actores reconocidos como James Coburn y Steve Mcqueen, solicitaran ser entrenados personalmente por Él.
9) Era un innovador. Perfeccionó algunas técnicas del Kung Fu en un estilo propio llamado “Jeet Kune Do” (el camino del puño interceptor). Basado en una filosofía que se caracteriza por su flexibilidad y adaptabilidad, poniendo como ejemplo el elemento más fundamental para la vida: el agua.
En fin, Bruce Lee fue uno de esas personas que ejercieron una gran influencia en el mundo, y gracias a su tenacidad y disciplina, acercó aún más a Oriente de Occidente. Es otro ejemplo de superación personal para todo aquel que desee transformar lo imposible en lo posible. Porque verdaderamente, todo está en la mente.