Durante mi embarazo tuve que suspender las salidas por instrucciones del médico, pero gracias a que atendí todas las indicaciones tuve una niña hermosa y sana que hoy está pocos meses de cumplir 15 años.
Hace unos días mientras hacíamos planes mi hija y yo para nuestro siguiente viaje pensé en todas estas andanzas que hemos tenido y llego a la conclusión de que hay 9 viajes que debemos hacer con nuestros hijos antes de que estos abandonen el nido.
Si bien mi hija es viajera porque su madre así lo es, creo que conocer otros lugares les da a los niños una impresionante capacidad de comprender más fácilmente el mundo que les rodea, además de los conocimientos que adquieren, la diversión y convivencia.
2. A la playa. El gran favorito de los pequeños es la playa y para muchos padres es un consuelo porque gustan de dejarlos jugar mientras ellos descansan. Solo les digo que el tiempo pasa rápido y no debe uno dejar pasar la oportunidad de hacer castillos de arena e ir a desafiar las olas del mar, porque cuando menos se lo imaginen el pequeño o pequeña ya no querrá hacerlo y ese momento no volverá más.
3. Al campo. Acampar es otro boleto! Andar entre ramas, bichos, tierra, plantas… cocinar en leña, comer lo que está a la mano… todo es aventura y eso a la mayoría de los niños les apasiona. Ve con ellos de campamento antes de que pierdan esas ansias por explorar.
4. A la gran ciudad o al pueblo. Si vives en una ciudad grande llévalo a pueblear; y viceversa, si viven en un pueblo muéstrale las grandes ciudades de su país. Será un viaje contrastante y aprenderán mucho juntos.
5. A la nieve. Desde algunos países, como México, no resulta tan fácil ir a conocer la nieve; sin embargo, ver su carita ante tan bellos y blancos paisajes vale la pena cualquier sacrificio. La nieve, así como la playa, atraen fuertemente a los niños, que fácilmente se ven conectados con el lugar y son recuerdos únicos.
7. Viaje en familia. Ya sea que vivan como pareja o no, dale a tus hijos la satisfacción de pasar algunas vacaciones juntos. Ver a sus padres que se tratan con cordialidad será una enorme satisfacción para ellos, después de todo se trata de solo unos días de compartir y convivir, y con un poco de empeño se logra.
8. Con mamá o con papá. Obligado viajar de vez en cuando solos con mamá o con papá para crear sus propias experiencias, aquellas en las que se logra la complicidad y se cuentan secretos.
9. Imaginario. Practicamente es el típico "Acapulco en la azotea", pero por supuesto que podrán ir a Bahamas, Bora Bora, Nueva York, Cancun, Paris... no hay límite. Es jugar y tener la suficiente disposición e imaginación para recrear el ambiente en la sala, la terraza, un balcón, el patio o el jardín. Esos viajes son una delicia porque todo puedo ocurrir.
El destino es lo de menos, lo importante es construir recuerdos inborrables y para ello, los viajes son el ambiente y momento perfecto.
Nunca he pretendido ser una madre perfecta y viajo con mi hija porque espero que cuando sea adulta pueda decir “la pasé de maravilla con mi mamá!”.