Picor, enrojecimiento, tirantez… son algunos de los síntomas de las pieles sensibles e intolerantes. Cuando la piel no tolera ningún producto hablamos de pieles intolerantes. Este tipo de pieles requieren un cuidado específico como el que proporciona la crema de Avène para pieles intolerantes.
Avène crema para pieles intolerantes posee un activo, la parcerina, que actúa sobre dos de las principales causas de las pieles intolerantes, la alteración de la barrera cutánea de la piel y la inflamación de la misma. Consigue hidratar y calmar la piel aportándole elasticidad y mejorando la retención de agua, prolongando de esta manera su hidratación y calmándola al mismo tiempo que la protege restaurando su función barrera.
Su fórmula posee pocos ingredientes, típico en las fórmulas destinadas a pieles intolerantes, destacando ya la reconocida agua termal de Avène que junto la parcerina hacen una combinación perfecta para calmar la piel y devolverle su confort y bienestar. Una fórmula ligera pero efectiva para el cuidado de las pieles sensibles e intolerantes.
Sin perfumes, ni parbenos, ni conservantes, ni colorantes, ni alcohol parece la fórmula perfecta pero tiene su lado oscuro: aceites minerales (parafina) y siliconas que se aprecian en su textura, ligera, suave, de fácil absorción, muy agradable al tacto y que no deja ninguna sensación grasa en la piel ¡No podía ser perfecta!
Así que, tras haberla probado, sí que resulta un buen producto para el cuidado de las pieles intolerantes, pero personalmente la rechazo por esas siliconas y parafina en su formulación, prefiero fórmulas que estén rozando el 100% naturales, pero bueno esto es decisión mía que prefiero una cosmética natural sin químicos. No quiere decir esto que el producto no sea efectivo, simplemente contiene unos químicos que a mi no me gustan y que tampoco le aportan nada beneficioso a la crema. Prefiero la sensación grasa durante unos minutos en la piel que dejan los aceites vegetales, que además aportan muchos beneficios a nuestra piel, antes que las parafinas y siliconas.
El envase, en tubo de 50ml, antes eran de 40ml, es muy acertado ya que impide que contaminemos el producto con las manos o que pierda sus propiedades por la oxidación en contacto con el ambiente.
El precio más que aceptable, entre los 13€-15€ podemos encontrarla aquí en Andorra. Esta es una de las ventajas de utilizar aceites minerales y siliconas en cosmética, reducir el coste y abaratar el producto final. (Vaya, sin poder evitarlo la estoy poniendo un poco verde :P)
En definitiva y conociendo la marca, sí que recomendaría esta crema para todas aquellas personas con piel intolerante y que buscan un cuidado diario efectivo para este tipo de pieles. Aunque para la rutina de noche elegiría una hidratación más profunda ya que esta me resulta bastante ligera, ideal para utilizar de día pero no la recomiendo de noche.
Puntuación 7/10
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