A JUAN PABLO II EN SU VISITA A ESPAÑA. María Antonia Rodríguez, 1982

Por Joseantoniobenito



Mi madre que está ya con Juan Pablo II, le dedicó este largo poema recordando su siembra a manos llenas en la primera visita a España.


Su foto de aquellos tiempos, junto con la de mi hermana Marian y su saludo al Papa.



A JUAN PABLO II EN SU VISITA A ESPAÑA


María Antonia Rodríguez, 1982



Al venir el Papa a España


lo debemos meditar,


no vino en plan turista,


vino a traernos la paz.


Es el mayor misionero


que nos dice la Verdad,


que Dios nació en Belén


y ejemplo nos quiso dar.


Que murió por nosotros


y nos sabe perdonar,


eso tenemos que hacer


si nos queremos salvar.


Al besar tierra española


escalofríos me dan,


ya que ha sido el primer Papa


que nos viene a visitar.


Lo primero que visita


Ávila la gran ciudad,


en donde Santa Teresa


fundó un Carmelo leal.


Y las monjas de clausura


rebosan felicidad,


al ser ellas las primeras


de ver a Su Santidad.


Pues parecían palomas


volando en un palomar,


todas con las tocas blancas


no se cansan de cantar.


Con las monjas Teresianas


fuimos en un autocar,


y a las seis de la mañana


alegres, venga a cantar.


Pero más madrugó el Papa


cómo voy a comparar,


si él estaba deseando


la doctrina predicar.


Pero las gentes de Ávila


bien nos quieren recibir,


nos dan a la entrada un libro


y también un banderín.


Ya nos entra la emoción


ya queremos ver al Papa,


para que nos ilumine


y alimente nuestras almas.


Y que bien alimentadas,


eso sólo lo hace Dios,


que fue una gran homilía


la caridad y el amor.


Cómo se quedó mi alma


al ver a Su Santidad,


me pareció Jesucristo


predicando la verdad.


Como IV Centenario


ya que en Alba se enterró,


meditemos en silencio


los conventos que fundó.


En Salamanca la voz


que por las calles se oía,


¡que poquito ha estado el Papa


haciéndonos compañía!.


Y las familias cristianas


que falta hacen en el mundo,


por eso el Papa ha querido


tocar aquí el primer punto.


De nuestros fieles difuntos


pronto de ellos se acordó,


por eso en el cementerio,


un responso le rezó.


Al héroe Pedro Bastardo


tengamos también presente,


que por ir a ver al Papa


encontró una buena muerte.


Pero en el cielo estará


ya que en gracia había vivido,


el estaba en la Milicia


bien amado y bien querido.


En el Santiago Bernabéu,


esto fue conmovedor,


la emoción de tantos jóvenes


verlos por televisión.


Aquí el Papa conmovió


“vosotros sois la esperanza


de la católica España


para salvar a las almas”.


Respondieron a una voz


“por las almas a luchar”


haciendo el bien en el mundo,


más almas se salvarán.


Al ser el Santo del Papa


le cantan ¡felicidad!


y nosotros oraciones


desde el pueblo de Rollán.


Cómo a San Juan de la Cruz


lo habíamos de olvidar,


si vino también por él


y al sepulcro visitar.


También tenemos la suerte


que en estas tierras de España,


sor Ángela de la Cruz


ha sido beatificada.


Y que las niñas que nazcan


le quieran poner de nombre


el de Ángela de la Cruz


y Juan Pablo a los varones.


Ya la católica España


se va decayendo más,


pediremos con más fe


y el terror terminará.


El apostolado seglar


es también muy principal,


haciendo bien en el mundo


más almas se salvarán.


El castillo de Javier


bien nos da que meditar,


vayan muchos misioneros


por el mundo a predicar.


Ya el Papa está en Zaragoza


ante el altar del Pilar,


que le siga dando fuerza


para poder predicar.


En Monserrat el trabajo,


pensad bien y meditar,


que rezándole a la Virgen


Ella lo concederá.


Cómo se pasan los días,


estamos en lo mejor,


un centenar de diáconos,


sacerdotes ordenó.


Ancianos, enfermos, niños,


a todos en general,


que haya siempre entre nosotros


ejemplo de caridad.


Los marinos en la mar


le hace falta mucha fe,


y que piensen en el alma


si no van a perecer.


Las ofrendas que le han hecho


como símbolo de amor,


llevará siempre a España


dentro de su corazón.


Y si alguna falta ha visto


nos lo sabrá perdonar,


siete veces pecó el justo


nosotros alguna más.


También los Reyes de España


bien recibieron al Papa,


que Dios le dé mucha fe


para poder gobernar.


El Papa ya se despide


y nos dice en su homilía,


¡hasta siempre!,


¡adiós España,


adiós tierra de María!.