La Asociación de hostelería berciana desglosa las condiciones del pliego publicado por la Junta de Castilla y León en un comunicado en el que, a los profesionales de hostelería no les cuadran los números. Este es el comunicado:
En estos días , el 21 de Enero de 2021, la JCyL convoca unas ayudas a la hostelería bastante controvertidas por varios motivos. Nos explicamos:
En el pliego que publica el BOCYL ayer, no puede estar peor explicado todo. Esto ha llevado a la mayor de las confusiones para todos los afectados. ¿Cual es la realidad? ¿Quiénes si y quiénes no? Ha sido extremadamente complejo descubrirlo. Y después de todo nos preguntamos: ¿Pasará lo mismo que con las ayudas para EPIS del 29 de Abril, que han vuelto denegadas hoy por insuficiencia de fondos de la subvención? ¿Son estas también ayudas para los primeros que se apunten, como ha pasado en esa ocasión, de forma totalmente injusta? Pues eso parece…
Los números no cuadran: el Registro de Turismo de Castilla y León cuenta con 32.860 inscritos, y si nos reparten 20 millones de euros, tocamos a 608 euros cada uno, lo cual difiere con las cantidades que publica la Junta, que pone la ayuda mínima en 1000 euros. Con 20 o 30 millones no llega ni para lo que ellos proponen. Lo que queremos hacer ver es que no llega ni para empezar con las empresas, que si calculamos lo que han tenido que pagar durante todos los meses sin ingresos, supera con creces esta cifra.
Por otro lado, el Estado(que no la Junta) ha desembolsado en gasto acumulado en prestaciones en CyL desde Abril, alrededor de 932 millones hasta 30 de Noviembre del 2020 según los datos ofrecidos en esa fecha. Más de la mitad de estas prestaciones han sido para los ERTES, lo cual es fundamental, entendemos.
Pero, si el tejido empresarial no se recupera, esos más de 500 millones que cuestan los ERTES no podrán ser asumidos por las empresas, al desaparecer y no poder recuperar sus trabajadores y los seguirá teniendo que poner el Estado. Sin embargo, apoyando a las empresas, el Estado puede ahorrarse la mayoría de esos 500 millones, que pasarán a pagarlos los negocios en sueldos.
Dar estas ayudas es el primer paso, porque por fin se reconoce que hay que avanzar en este sentido y que es justo indemnizarnos. Pero ahora la discusión es que la cuantía es ridícula.
Por ejemplo, si en 9 meses de pandemia en 2020 el más pequeño negocio de hostelería habrá pagado alrededor de 1000 euros mensuales de alquiler (de Abril a Diciembre), y 500 euros mensuales de gastos generales, agua, luz, basuras, teléfono, etc… eso suma 13.500 euros y si esto lo multiplicamos por 32.860 inscritos en el registro de turismo nos da 443.610.000 millones de euros.
Estas son cifras para cualquier pequeño negocio, así que no queremos imaginar las de un hotel o un restaurante con más de 10 empleados, que los hay, y muchos. Hagan ustedes el cálculo necesario para recuperar a un sector de la comunidad que va a asumir después la recuperación de esos trabajadores en ERTE. Si esto no es así, el estado puede seguir gastando