"A mi hijo" de Rudyard Kipling

Por Myriam Cabanillas
Hoy leyendo por enesima vez  "Tu hijo, Tu espejo" de Martha Alicia Chavez, he vuelto a leer este poema precioso de Rudyard Kipling, que espero que disfruteis tanto como yo:
"Hijo mío :
Si quieres amarme bien puedes hacerlo
tu cariño es oro que nunca desdeño.
Más quiero que sepas que nada me debes
soy ahora el padre, tengo los deberes.
Nunca en la alegría de verte contento
he trazado signos de tanto por ciento.
Más ahora mi niño, quisiera avisarte
mi agente viajero llegará a cobrarte
te presentará un cheque de cien mil afanes
será ¡Un hijo tuyo, gota de tu sangre!
y entonces mi niño, como un hombre honrado
en tu propio hijo deberás pagarme."

Myriam Cabanillas