A pesar de su comportamiento extrovertido, Olivia se siente exasperantemente insegura con los hombres; por lo general, ni siquiera es capaz de encontrar valor necesario para acercarse a alguien que le gusta. Sin embargo, trasladarse a Edimburgo ha supuesto empezar de nuevo y, después de sentirse atraída por un sexy estudiante de posgrado, decide que ya es hora de dejar de lado sus miedos e ir en busca de lo que quiere.
Nate Sawyer es un seductor guapísimo que nunca se compromete, pero con sus amigos íntimos es sumamente leal. Así pues, cuando Olivia acude a él para contarle sus penas, Nate se ofrece a ayudarla a mostrarse más segura en sus relaciones con el sexo opuesto.
La educación en seducción pronto deja de ser un favor entre amigos para convertirse en un intenso y acalorado romance… hasta que el pasado y los problemas de Nate a la hora de comprometerse hacen acto de presencia y Olivia termina desconsolada. Cuando Nate se dé cuenta de que ha cometido el mayor error de su vida, tendrá que esforzarse más que nunca para reconquistar a su mejor amiga, si no quiere perderla para siempre.
Tenía bastantes ganas de leer esta novela porque Olivia es un personaje por el que sentía mucha curiosidad. Había leído tambien bastante buenas críticas de la novela y estaba deseando que saliera en español para poder leerla. Aunque tenia cierta reticencia y cierto miedo por el tema de la traducción. A pesar de esto me arriesgue con ella y no me arrepiento. Es una novela muy buena, quizás menos profunda que las anteriores pero a mi me ha encantado. Creo que es muy dinámica y fresca y la traducción no me ha parecido tan mal como la de libros anteriores.
La novela aborda la historia de Olivia, una joven que acaba de irse a vivir a Edimburgo. Es una joven según ella con algunos kilos de mas que se ve poco atractiva y tiene la autoestima por los suelos en lo que se refiere a la relación con los hombres. A pesar de que tiene un sentido del humor muy ácido, que es encantadora y que tiene cierto atractivo no se ve capaz de flirtear ni de coquetear con ningún hombre. El motivo es que no tiene la suficiente seguridad en si misma como para abordar a un chico que le gusta y mantener una conversación. Olivia es tímida, insegura y bastante friki. Esto último no tendría porque ser un handicap, al menos así lo piensan todos los que la rodean. E nmuchos aspectos creo que los lectores se pueden sentir identificados con ella, entre los que me incluyo. Es cierto que puede sonar raro que en pleno siglo XXI una joven de veinteseis años no haya tenido ningun tipo de experiencia con los hombres, ni flirteos, coquetos y no hablamos ya de relaciones sexuales. Aunque puede parecer raro a priori, creo que no es tan raro. Muchas personas con este tipo de “problemas” lo ocultan por miedo a la vergüenza o a las burlas de sus compañeros y amigos. Es cierto que hoy en día la mujer es más liberal y que la gente joven empieza a tener relaciones bastante jovenes pero eso no significa que haya personas que por sus circunstancias personales, sus complejos sobre su físico u otras circunstancias, pues empiecen bastante más tarde como le sucede a Olivia.
Olivia es el personaje que más me ha gustado hasta ahora de la serie y he conectado muy bien con ella. Es una mujer con mucho carácter que solo necesita un empujoncito para creen en si misma y necesita sentirse atractiva para un hombre. Lo necesita para poder sentirse querida y amada. Además creo que la autora ha hecho más que bien en emparejarla con Nate. Nate es un hombre atractivo, sexy, popular entre las mujeres, seguro de si mismo y de su sexualidad. Me ha encantado como personaje porque es exactamente lo que necesita Olivia.
Nate es un playboy, si, y además lo reconoce. No tiene problemas para conseguir a la mujer que desea, ni para darse un revolcon con ella y luego marcharse por la puerta sin hacer promesas. Sin embargo, no es ni tan cretino ni tan canalla como muchas lectoras puedan pensar. Detrás de esa actitud se esconde la perdida de un amor de juventud en circunstancias dolorosas que han hecho que Nate le tenga miedo a enamorarse y también al compromiso. Nate es una personaje con el que conectas enseguida, es encantador, sexy y muy simpático. Es un hombre con el que pasarias un buen rato, te sentirías tan agusto que digamos no te ofende ni te hace sentir herida cuando te dice que no puede ofrecerte un compromiso porque ante todo va con la sinceridad por delante. Es difícil enfadarse con él.
Olivia y Nate son amigos, los mejores amigos del mundo. Comparten gustos afines, son igual de frikis con el cine, la música y otras aficiones. Ambos tienen un humor ácido y muy particular. Se compenetran muy bien, se entienden a la perfección. Olivia ve a Nate como alguien a quien desea pero no puede tener, alguien inaccesible. Nate ve en Olivia un amiga incomparable. Cuando Olivia decide que ya esta cansada de no poder llevar una vida normal en lo que a las relaciones con los hombres se refiere le pide ayuda a Nate. Ninguno de los dos pensaba que el camino al que se enfrentaban les iba a cambiar tanto. Olivia se dara cuenta de que Nate es el hombre que ama y Nate se dará cuenta de que Olivia es la mujer que le complementa. Aunque se dará cuenta tarde y luchará con todas sus armas, incluyendo jugar sucio para conseguir tenerla en su vida de nuevo.
Como podéis observar “Calle Jamaica” es una novela que me ha encantado. Olivia y Nate pasaran a mi lista de parejas favoritas y esta novela se encuadra entre mis novelas favoritas. Puede que no sea tan profunda como las demás, ni haya tanto drama pero me ha parecido estupenda, divertida en algunos momentos, entrañable y muy tierna. Sin duda la recomiendo. A quienes les guste esta serie no pueden dejar de conocer a Olivia y Nate.