A propósito de El Roto: verdad & mentira asociados

Publicado el 29 enero 2011 por Noblejas

El Roto publica hoy esta viñeta: como es natural, no es posible saber si piensa en el resultado de fusiones y financiaciones en su lugar de trabajo o también en los restantes medios de comunicación. O si piensa en las corporaciones empresariales o en las instituciones públicas: ministerios, juzgados, parlamentos, etc.

He de decir que, al verla, me ha venido a la memoria algo que publiqué en el prólogo de un libro llamado Comunicación borrosa, citando a Ismail Kadaré al hablar de los medios de comunicación en general y diciendo que

en no pocas ocasiones se utilizan con pretensión de emborronar y confundir la ya abundante bruma ambiental, mezclando la verdad con la mentira. Nada mejor para expresar en su justa medida esta propensión mediática, sin tener que hacer alusiones explícitas a nuestro entorno, que unas palabras tomadas de un reciente relato de Ismail Kadare. Dice así:

“Los emisarios de antaño, por lo general ceñudos y sombríos como cuervos, fueron sustituidos por correos parlanchines, impacientes a toda hora por encontrar la ocasión de sentarse a charlar con los viajeros que encontraban de paso en las posadas.

No resultaba difícil imaginar que eran portadores de dos especies de relato: el verdadero, que ocultaban celosamente, y el falso, retazos del cual ponían al descubierto supuestamente de forma casual o simulando estar ebrios, durante las veladas en torno al hogar.

Aquella primavera las noticias falsas, tal como era de esperar, perjudicaron con frecuencia al adversario, porque no pocas veces sucedió también que sus propios autores acabaron siendo víctimas de ellas. Las rutas que conducían desde la capital turca hasta Venecia eran largas y llevar consigo la mentira y la verdad a un tiempo no resultaba tarea fácil. A veces la verdad, otras la mentira, goteaban destiñéndose la una a la otra, incrementando así la bruma del ambiente, que no era de por sí escasa aquel mes de marzo” (Tres cantos funebres por Kosovo, 1999, Alianza Ed., pp. 23-24). 

A lo mejor estas palabras ayudan a seguir pensando desde el sin palabras de El Roto de hoy.