Este último día del año, no pude evitar observar con detenimiento como forjamos un camino de regreso en nuestros acontecimientos, hacemos un inventario de lo que pudimos lograr o en las trampas que caímos de lo que suponemos un fracaso, un balance de impuestos que hemos pagado, indicadores de rutas que no salimos bien librados, por decisiones equivocadas.. y pensamos... -¿realmente alguien se paró a escuchar mis anécdotas ocurrentes?, mis frustraciones como una persona aturdida, la felicidad que se impone por necesidad de subsistir, si este año que pasó fuimos felices, si fuimos buenas o malas personas con los demás, si vagamos en la incredulidad del éxito, si nuestro ego ha sido saciado para sentirnos fuertes e implacables, si nos cautiva la propia vida de un año más, regenerando nuevas energías con el fin de alimentar nuevas esperanzas, espectativas, sueños, ilusiones, amores, finanzas...
A todos aquellos que están dispuestos, Feliz año 2015...Mónica Núñez Soberanes.