Escribió Chesterton que Dios trastorna el mundo para que germinen santos. Sí, Él escribe derecho con renglones chuecos, que dicen en Perú. Hace 40 años, el 31 de mayo de 1970, el violento terremoto de Ancash sepultó a 70.000 personas. Ayer entrevistaba para PAX TV a Michel Azcueta, alcalde de Villa Salvador en varios periodos, con motivo de los 25 años en el Perú. Él recaló en el Perú como voluntario para apoyar a los damnificados del terremoto. Lo mismo sucedió con el P. Roberto Padrós, fundador del canal. Los dos vinieron por unos días y siguen en Perú. Descubrieron “que el terremoto destruye pero el compartir CONSTRUYE” . Dios quiera que suceda lo mismo en Haití y en las zonas castigadas del Perú en estos momentos, Cuzco, Chota… Les comparto una nota impresionante sobre Haití en que se demuestra que “después del eclipse el sol brilla más”. La acción lleva a la oración y la oración a la acción. A Dios rogando y con el mazo dando
Los ciudadanos de la isla abarrotan los templos cuando se cumple el primer mes del terremoto.http://www.hazteoir.org/node/28064
Se cumple hoy el primer mes del terremoto que asoló Puerto Príncipe, y los haitianos se han lanzado a la calle para rezar por sus muertos. Las crónicas de los corresponsales de los periódicos hablan, no sin cierto asombro en algunos casos, de la ingente cantidad de personas que abarrotan las ceremonias religiosas de estos días.
Los corresponsales de El Mundo comentan que “Haití se ha convertido en una gigantesca iglesia y una fiesta de recogimiento, Haití, Misa en memoria de los fallecidos en el terremoto cantos y oración”:
“Decenas de miles de personas se han reunido en distintos puntos de la capital en señal de duelo. Un duelo que los haitianos celebraron abriendo los brazos, cerrando los ojos, apuntando su rostro al sol y cantando durante horas hasta el llanto.
Católicos y protestantes llenan iglesias y campos religiosos improvisados en la calle para rezar a sus más de 217.000 muertos. En muletas, en sillas de ruedas o cojeando decenas de mutilados se sumaron a la gran marea blanca que se concentró en la plaza en el 'Camps de marts' de Puerto Príncipe, epicentro de una celebración que durará tres días.
Desde las seis de la mañana un goteo incesante de personas llenó la plaza hasta desbordarla por completo pocas horas después. Desde lo alto del estrado se leía la Biblia y se pedía "un Haití unido para afrontar el futuro". Desde abajo familias enteras seguían con su propia Biblia las lecturas del nuevo testamento y rezaban y aplaudían con un entusiasmo que desbordaba los escombros.
"Me siento bien, esta es la mejor ayuda que tengo" explica un joven con aspecto de 'hip-hopero' llegado desde un parque cercano en el que duerme. Su aspecto de pandillero violento nada tiene que ver con los ojos llorosos con los que habla después de escuchar 'la palabra de Dios' desde el improvisado púlpito.”
La agencia gubernamental EFE trata de pasar de puntillas sobre las celebraciones religiosas de estos días en Haití, pero reconoce que “el gentío se agolpaba en el exterior de decenas de iglesias de la capital y en otros lugares habilitados como zona de culto, mientras las actividades cotidianas se han paralizado”.
La cadena SER describe el momento más emotivo de la jornada de hoy en la isla:
“Un gesto unirá a los haitianos del país y a los que se encuentran fuera de él. Está previsto que a las 16:53 horas (22:53 hora española), justo el momento en que el terremoto de más de siete grados en la escala Richter sacudió el país, los haitianos se arrodillen y recen por las víctimas.”
El servicio internacional de la BBC explica que las autoridades haitianas han dispuesto la instalación de pantallas gigantes en los campos de desplazados para que puedan seguir las ceremonias religiosas.