Poeta del otoño, de los jueves, de la gente, de la gente que sufre a solas, en silencio, en las sórdidas esquinas. Heraldo de las guerras perdidas, y de las súplicas negadas ante los más fuertes.
Tus letras son el eco de un grito puro, desesperado: Versos de sangre inca plasmados en patria blanca, memorias de un pueblo esclavo que solo es libre en la palabra.
Lamentaciones del aquel pasado que nos persigue a todos lados. Recuerdia