2 junio 2015 Deja un comentario
A veces encuentras a alguien en tu vida que no es para ti, pero que cuando te cruzas con él, tu corazón da un vuelco y no sabes por qué.
A veces la vida se empeña en repetir ocasiones, momentos normales que se convierten en especiales sin saber por qué.
Y de pronto una noche cualquiera te das la vuelta y está ahí, y lo besas sin saber por qué.
A veces las dudas más absurdas se entrecruzan con oportunidades para ser feliz, y comienza un tira y afloja en tu corazón.
Y de pronto, esa persona que no es para ti se hace importante, pero tus propios demonios rechaza la idea de que pueda ser él.
Y surgen las ocasiones, se repiten, se eternizan en momentos que te dejan sin aliento.
Y esa persona que no es para tí, hace que el mundo se pare cuando estas con él, que desaparezca el tiempo, que encuentres comprensión, que un abrazo sea la mejor medicina.
A veces el cantor tiene razón, y una noche de amor desesperada en la que te dejas llevar, te dejas hacer, te deja disfrutar, te deja sin fuerzas y dibuja una sonrisa en tu piel agotada llevada la límite y a veces el placer se convierte en lágrimas, lágrimas de placer, de éxtasis, de pasión.
Pero cuando la vida te pone delante a alguien que no es para ti y te convences que es demasiado bueno y que no te lo mereces…tu subconsciente te lleva a hacer cosas incoherentes, injustas, imperdonables.
Y la vida, esa que a veces te da lo mejor …te lo quita por qué sabes que no es para ti.
Y el cantor tiene razón, y aunque fui yo quien decidió que ya no más, me cuesta tanto olvidarte.
(Escrito desde el corazón por Rosario Rodríguez)