Yo confieso: nunca elijo el nivel difícil al empezar un videojuego. La falta de tiempo y mi natural capacidad para frustrarme y acabar tirando el mando contra el suelo en una explosión de odio contra el mundo hacen que busque una dificultad cómoda, que me ponga en aprietos pero no mucho, lo suficiente para no terminar dándole puñetazos a la puerta entre gritos e insultos o tirando la consola por la ventana. ¡Yo he venido aquí a divertirme, no a sufrir!
Así que no pienso acercarme siquiera un poquito a Give Up, el juego flash desarrollado por John Cooney y Tasselfoot para Armor Games. El nombre, Abandona, ya nos dice mucho de las intenciones de sus creadores: una cosa es que a cada nivel que vayamos superando, lógicamente, el tema se complique, y otra que llegue un momento en el que la única solución sea quedarse quieto y llorando en un rincón, porque cualquier movimiento que pretendas hacer te pondrá al alcance de un láser que te reventará en mil pedazos o acabarás empalado en una trampa mortal.
Si queréis imaginar por un momento cuál sería mi más que probable reacción jugando a Give Up, os podéis hacer una idea con este vídeo grabado por Michael de Rooster Teeth mientras echaba una partidilla. Descorazonador.
Y los de la vieja escuela que pensáis que los títulos de estos tiempos son una basura en comparación con los que nos tenían de pequeños tardes enteras enganchados en casa (sin puntos de guardado y con dificultades infernales) podéis jugar aquí. ¡Mucho ánimo! Si os hartáis, siempre podéis darle al botón de abandonar y acabar con vuestro sufrimiento…
Vía Laughing Squid.
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