Ayer, los accionistas de Abertis dieron su conformidad a la ya conocida segregación de la entidad en dos sociedades dando como resultado el nacimiento de Saba Infraestructuras.
Pero la noticia surgió, horas antes, en el continente americano donde un consorcio participado por Abertis resultaba ganador para la gestión de dos autopistas en Puerto Rico.
En concreto, un consorcio liderado por el fondo de inversión Goldman Sachs Infrastructure Partners II (55%) y Abertis (45%) ha sido seleccionado por el Gobierno de Puerto Rico para gestionar las autopistas PR-22 y PR-5 por un periodo de 40 años. La sociedad conjunta, denominada Autopistas Metropolitanas de Puerto Rico LLC (Metropistas), desembolsará un canon concesional de 762 millones de euros.
El consorcio financiará la operación con un 40% de capital mientras que apalancará el 60% restante con deuda a largo plazo para la cual ya existe una oferta en firme por parte de un grupo de 12 entidades financieras, sin que se hayan dado a conocer las condiciones, y que se cerrará en septiembre.
Alemany especifica que esta operación “no supondrá dilución alguna para el rating corporativo de Abertis” pero la sociedad deberá desembolsar 137 millones de euros y ampliar su endeudamiento en más de 205 millones adicionales.
A finales de 2010 la deuda ascendía a 14.651 millones con una ligera mejora de la ratio de deuda sobre Ebitda de tres décimas para situarse en 5,9 veces. Esta operación hará volver la ratio a niveles de 2009.
De todas maneras, el hecho de disponer ya de una concesión en ese estado caribeño desde hace 16 años (el puente Teodoro Moscoso) le da a Abertis un conocimiento del terreno y la posibilidad de generar sinergias.
Con ésta ya son dos las concesiones que tiene Abertis en Estados Unidos, un territorio que se ha convertido en uno de los focos de negocio futuro de la entidad. En palabras de su presidente, Salvador Alemany, “uno de los países emergentes desde el punto de vista de las concesiones de autopistas”.
Con esta concesión cambia el modelo de crecimiento de Abertis que se apoya en partners financieros mayoritarios para afrontar grandes proyectos.
Barajas y El Prat
Respecto a la posibilidad que Goldman Sachs se convierta en un socio estratégico de Abertis en nuevas inversiones, el consejero delegado de la entidad, Francisco Reynés, cree que “podría ser el inicio de una relación a largo plazo". Para la formación del consorcio que participe en la puja por las concesiones de los aeropuertos de Barajas o El Prat, "no descartamos a nadie a día de hoy, aunque hay muchos más inversores interesados”. Este es sin duda el reto a corto de mayor interés para la gestora catalana.
Y es que en estas futuras concesiones de Aena están interesando a grandes operadores internacionales como el grupo galo AXA, socio de Abertis en Sanef, la francesa Aeroports de París, la alemana Fraport o la inglesa GIP. Entre los españoles, han mostrado su interés también grupos como ACS, Ferrovial, Globalvía o Acciona.
Alemany señaló la “peculiaridad que Aena constituya la concesión y luego licite un porcentaje de la misma en dos de sus filiales" y advirtió que estos dos aeropuertos solo son un primer paso, “Aena podría licitar más concesiones"
Saba Infraestructuras apuesta por el liderazgo
Saba Infraestructuras (SI) ya tiene el plácet para nacer. La junta de accionistas de Abertis aprobó la segregación y, de esa manera reforzó todavía más su balance. La operación le permite reducir su endeudamiento neto en 688 millones.
SI seguirá una política de dividendos muy similar, estable y creciente. En 2012 el compromiso mínimo es del 2% de los fondos propios, con un incremento anual del 5%.
Los socios, con La Caixa a la cabeza, pretenden convertir a la sociedad en el operador de referencia en la gestión de aparcamientos y parques logísticos, lo cual implica operaciones de compra o fusiones en los próximos años, lo que conllevará ampliaciones de capital.
Junto a la caja catalana, los nuevos socios, Torreal y ProA Capital, plantean que SI se convierta en un operador global, lo cual implica que, a largo plazo, la entidad deberá acabar siendo una cotizada