La Cunninghamia es una conífera de rara presencia en los jardines, que crece en estado silvestre en China. Fue descubierta por J. Cunninghan a principios del siglo XVIII, por lo que lleva su nombre .
Descripción
El abeto chino tiene cierta semejanza con las Secuoyas en cuanto a la disposición de las hojas sobre las ramas, pero se distingue por sus hojas, que son anchas en la base y muy puntiagudas en el extremo, de color verde azulado por el haz, cara superior, y con dos bandas grisáceas por el envés, cara inferior. En el otoño, todo el follaje del abeto chino se torna de un intenso tono rojizo, al igual que le sucede al cedro japonés, Cryptomeriasp, con el que está íntimamente emparentado. Las ramas de este árbol, que forman una copa abierta, se curvan en los extremos de una manera que es característica en esta especie. Con el paso de los años llega a superar los 40 m. de altura, pero lo más normal, sobre todo en nuestras latitudes, es que los ejemplares de jardín se estabilicen en torno a los 15. Contrariamente a lo que sucede con la mayor parte de las coníferas, las Cunninghamias rebrotarán desde la base si se las corta, aunque el posterior desarrollo carecerá de la elegancia natural de los ejemplares no sometidos a esta práctica.- Cuidados- Consejos