Después de esta sabia lección de biología católica, el libro en el que algunos de nuestros muchachos se preparan para ser ciudadanos de provecho y encontrar un trabajo el día de mañana, hace una apasionante incursión en otros asuntos no menos proclives al análisis biológico desde un punto de vista estrictamente científico. Es el caso del aborto que, según el manual, va de mal en peor en España. Tal es así que nuestro país es el único en Europa en el que el número de interrupciones del embarazo no ha dejado de crecer exponencialmente en los últimos años. Que las cifras que da superen en 18.000 abortos a las que maneja el Ministerio de Sanidad no debe hacernos creer que los autores han inflado los datos, sino que en Sanidad son unos zotes que no saben ni llevar el cálculo como es debido. Llega incluso a afirmar que la causa principal de los abortos es la económica, lo que tampoco aparece por ninguna parte en las estadísticas del Ministerio.
Tampoco es que importe mucho - deben haber pensado los autores del engendro - toda vez que no es muy probable que alguien se plantee confrontar esas cifras con las oficiales y ver si hay truco. Así que, por qué no mentir y exagerar un poco si eso favorece a la causa. Las autoridades educativas, que se han enterado por la prensa de la presencia de este libro en sus aulas, se afanan ahora dando plazos para cambiar los contenidos del libro o retirarlo de los centros educativos. Después será Sodoma y Gomorra, sin una guía biológico - católica que los oriente en la vida podrán los chicos y chicas retornar al retozo y a la promiscuidad más desenfrenada. ¡Ay, Ripalda, cuánto te siguen añorando algunos!