Abuelos y virus

Por Cogito

Uno de los efectos colaterales del maldito corona virus que nos invade es que te hace cobrar conciencia del rango que te corresponde por tu edad: población de riesgo.

Tengo dos hijos y cuatro nietos que viven en Madrid. Unos días antes de estado de alarma les dije que podían venir y estaríamos más tranquilos en el campo. Nos dijeron que no lo harían para evitar ponernos en peligro (eso mismo me cuentan algunos amigos), respuesta que   a mi mujer y a mí nos enorgullece.

Todo pasará. A pesar de la miopía y lentitud de un Gobierno distraído que va por detrás de los acontecimientos, gracias a la responsabilidad individual y colectiva, a ese espíritu solidario que nos brota en momentos cruciales, sabremos estar a la altura de las circunstancias y venceremos al microbio nefando. Encontraremos una vacuna y el primer semestre de 2020 será un mal recuerdo. Amén