Academia Rushmore + Kafka y la muñeca viajera

Publicado el 20 julio 2019 por Lu

He comentado en el blog varias obras de este director, con resultados muy dispares. Nunca sé si me va a encandilar, o a dejar enrabietada ante semejante cúmulo de disparates.

En esta ocasión se resume enseguida: fascinante.
Academia Rushmore

Max Fisher (Jason Schwartzman), un alumno de Rushmore, una de las escuelas más prestigiosas del país, es el editor del periódico escolar y el capitán y presidente de numerosos clubs y sociedades; pero también es un pésimo estudiante que está siempre al borde de la expulsión. Max se enamora de Miss Cross (Olivia Williams), una joven y encantadora profesora, pero su cortejo peligra porque el señor Blume (Bill Murray), padre de dos compañeros de clase, intenta también conquistarla.

Con su estilo peculiar, con su potente colorido e imágenes que toman protagonismo en la historia. Un personaje principal a ratos detestable, a ratos entrañable. Excelente trabajo de los actores y una banda sonora repleta de preciosas canciones. Me ha gustado mucho, me ha sorprendido.
Creo que hay que encontrar algo que nos guste, para hacerlo el resto de nuestra vida.
La guerra cambia a los hombres.
Sociedad de cometas.

Título original Rushmore. DirecciónWes Anderson. Guion Wes Anderson, Owen Wilson. Música Mark Mothersbaugh. Fotografía Robert D. Yeoman. RepartoJason SchwartzmanBill MurrayOlivia WilliamsSeymour CasselBrian Cox,Connie NielsenLuke WilsonMason GambleStephen McCole. EE UU 1998, 93 min.
El Gran Hotel Budapest
Los Tenenbaums. Una familiade genios
Moonrise Kingdom
Viaje a Darjeeling
Life aquatic
Ladrón que roba a un ladrón
El escritor se decide a recrear el suceso relatado en el artículo de Cesar Aira sobre una anécdota maravillosa acontecida en la recta final de la vida de Kafka. Cartas dirigidas a una única lectora, una niña pequeña que llora desconsolada en el parque.

Kafka y la muñeca viajeraJordi Sierra i FabraIlustrador: Pep MontserratNº de páginas: 152Editorial: Siruela 2007ISBN: 9788498411164

Un año antes de su muerte, Franz Kafka vivió una experiencia muy insólita. Paseando por el parque Steglitz, en Berlín, encontró a una niña llorando desconsolada: había perdido su muñeca. Para calmar a la pequeña, el autor de La metamorfosis se inventó una peculiar historia: la muñeca no se había perdido, se había ido de viaje, y él, convertido en cartero de muñecas, tenía una carta que le llevaría al día siguiente al parque.
Es de esos textos breves que te transporta a un universo infantil donde se puede crear una fantasía para consolar el llanto de una niña. Su objetivo es transformar el dolor en ilusión, darle una explicación, llenarla de esperanza y hacerla partícipe de la felicidad de su muñeca. Ejerce la mejor profesión que ha desempeñado jamás: cartero de muñecas. Esos encuentros con la pequeña, ávida de novedades sobre las andanzas de Brígida, dotan a Kafka de ternura.
Un libro que nos hace soñar. Una colección de cartas con una única destinataria, jamás encontradas.
Leer inicio