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La historia de Catalina Hornos fue ampliamente difundida por la televisión, ya que participó...
de un ciclo denominado Abanderados de la Argentina Solidaria (Canal 13), en el que obtuvo el tercer puesto por el trabajo que desarrolla en Santiago del Estero, a través de la Fundación Haciendo Camino. Pero no trabaja en soledad. En su lucha por mejorar el bienestar de los niños de distintos puntos de la provincia la acompañan Eletra Viel, Zulma Aranda y Walter Rodríguez. Y si bien la fundación nació en Añatuya, también tiene sedes en Monte Quemado y en el barrio 8 de Abril.
La felicidad con la que desarrollan a diario su tarea comunitaria la compartieron anoche al recibir la estatuilla de Los Destacados del Año, que les otorgó el diario EL LIERAL sobre la base de su acción comunitaria.
Catalina Hornos tiene 26 años y construyó el primer Centro de Prevención y Atención de la Desnutrición en Añatuya consciente de que niños malnutridos no logran desarrollar las capacidades intelectuales básicas para crecer con igualdad de oportunidades. Para ellos, la desnutrición es un flagelo irreversible.
Esta joven llegó a Añatuya en 2006, desde su Buenos Aires natal, recién recibida (es psicóloga y psicopedagoga), junto a seis amigos, para ver cómo viven los pobladores de los parajes rurales más alejados de la ciudad. Allí descubrieron la dolorosa realidad de muchas familias que tratan de sacar adelante a sus hijos, en condiciones de extrema pobreza. Por eso fundaron, entonces, Haciendo Camino, como medio para empezar a revertir la situación.
Acciones
Catalina se puso en contacto con Conin, la fundación de Abel Albino pionera en la lucha contra el hambre, y en alianza con ellos replicaron su modelo en Santiago del Estero, dando forma real al primero de tres Centros de Prevención de la Desnutrición levantados por Haciendo Camino en esta provincia.
Catalina se mudó definitivamente a Santiago, para comprometerse hasta el final.
“Viendo la cantidad de niños y adultos con importantes dificultades de aprendizaje descubrimos que la desnutrición infantil causa deficiencias irreversibles y decidimos combatirla”, resume Catalina.
El trabajo por mejorar el futuro de los niños no tiene descanso y cada vez son más los voluntarios.
Fuente: elliberal.com.ar