No es que la pedimos porque somos caprichosos, mezquinos o, como nos dicen algunos de ustedes: tiranos.
No, nada de eso. La necesitamos porque somos vulnerables, sensibles (altamente sensibles). La necesitamos porque nos estamos moldeando, porque nuestras bases emocionales, que nos acompañarán toda la vida, aún se encuentran en construcción. Por eso la necesitamos. Por eso a veces tenemos que comportarnos “de manera extraña” para recibirla. A esto último agrego que ustedes también lo hacen… sólo que entre ustedes mismos sí lo toleran (qué injusto, ¿no?). Como suele decir mi Abuela: "Entre bomberos no se pisan la manguera".La tercera acotación que deseo hacer es que para nosotros (Y creo que para ustedes también) Amor se deletrea T-I-E-M-P-O. Si no nos dedican tiempo y atención (atención verdadera, no sólo material), si no nos escuchan, si no nos respetan, si no nos tienen paciencia… ¿Por qué creen que deben recibir todo esto de nuestra parte? Recuerden que somos su espejo, por favor… que no se les olvide eso.La cuarta aclaratoria es que somos niños, no proyectos. No trofeos. No conejillos de india. Si nos exigen demasiado, si lo que desean es que seamos perfectos, que tengamos las mejores calificaciones, que siempre el entorno nos aplauda (y los aplauda a ustedes, cosa que creo les importa más) nos sentiremos estresados, cansados, aburridos, irritables, menospreciados, chantajeados, utilizados, y mejor no sigo porque siento que me estoy enojando y temo que me lleven a un especialista para que me etiquete, me haga ver como un ser malévolo y (Oh, no… eso es lo que más temo) me medique para que me “porte bien”.Por ahora lo dejaré hasta acá (pero esto no acaba aquí), pues las cartas largas son aburridas para mí.
Los adultos aman los textos largos, especialmente cuando dicen mentiras o alabanzas que no incomodan, pero sí que inflan el Ego. Pero no creo que este sea el caso, pues estoy siendo sincero y la verdad asusta, especialmente cuando se ha perdido la inocencia y la pureza del alma.No he escrito esto con rabia, no es mi intención sacarles nada en cara, no pretendo hacer sentir mal a nadie. Recuerden que los niños siempre perdonamos. Lo único que trato de hacer acá es defenderme y defender a mis iguales. Pues pocas veces nos dejan decir la verdad, pocas veces nos salvamos de un castigo por expresar aquello que sentimos, pocas veces se nos permite ser lo que verdaderamente somos... niños, y nada más!
Por Elvis Canino