ÁCRONOS volumen dos. Antología steampunk. De vv.aa.

Publicado el 30 junio 2014 por Palabrasdeunhombredisperso
"Ácronos. Antología steampunk, volumen dos" (febrero 2014) es una magnífica antología que reúne a quince excelentes escritores nacionales, apadrinados por S. J. Chambers. Eduardo Vaquerizo (La última noche de Hipatia), Concepción Perea (La corte de los espejos), Rodolfo Martínez (Los sicarios del cielo), Josué Ramos (Lendaria), y Rafael González (El secreto de los dioses olvidados) junto a Héctor Gómez Herrero, Paulo César Ramírez, Gloria T. Dauden, Ángeles Mora, Cristina Puig, Pedro Moscatel, Luis Carbajales, Laura López Alfranca y José Ramón Vázquez forman el elenco de escritores que, con sus relatos, nos invitan a entrar en su mundo de válvulas y tuercas.
Como toda antología, tiene sus más y sus menos, aunque el conjunto creo que llega a rozar el sobresaliente, convirtiéndose en un muy válido compendio de este género temático tan en boga. Resumidamente, hablo de los relatos que nos ofrecen.
- La Venus de Great Neck (S.J. Chambers). El relato estrella, la obra maestra y carta de presentación. Chambers traza un ambiente victoriano a la perfección, y añade a su historia ciertas dosis de tensión que inquietan al lector. Un relato que seguro gustará, aunque no lo considero cien por cien steampunk.
Las hermosas Jaradalias (Gloria T. Dauden). Dos hermanas con deformidades viven esclavizadas en un circo, y tratarán de escapar de las garras del marqués. Una autora que, poco a poco, se está especializando en el género retrofuturista y que, a cada uno de sus relatos, nos sorprende con una visión apartada de los cánones habituales. 

- De cómo perdí la cabeza de mi padre (Eduardo Vaquerizo). Uno de los nombres más destacados de la antología y uno de los relatos que pasan menos desapercibidos. Acción a raudales con un ritmo que llega a colapsar por su rapidez y su precipitación pero que resulta muy entretenido.

- El silencio de Edith (Ángeles Mora). La autora se aparta del steampunk y trabaja más los elementos típicos del clockpunk en una historia que sorprende por su final inesperado.

- Bajo la linterna (Héctor Gómez Herrero). Uno de los relatos que más me han gustado, aunque con unos referentes bastante obvios que no mencionaré por no dar pistas. Un mundo distópico postapocalíptico bien dibujado y con una atmósfera bastante lograda. 

- ¿Estás ahí? (Cristina Puig). Aunque considero que la autora tiene un gran talento para las letras, este relato me ha parecido falto de sorpresa y originalidad, jugando con el tema tan recurrente de la resurrección de los muertos.       

- Disparos en la niebla (Pedro Moscatel). Original y complejo a la vez, aunque su lectura requiere de cierto esfuerzo que cualquier lector no tendrá problema en ejecutar. Moscatel nos demuestra que el steampunk está abierto a nuevos conceptos aún por explotar. Sobresaliente. 

- Laya (Josué Ramos). El coordinador de la antología nos ofrece un relato de steampunk ibérico entretenido y correcto, aunque escaso en cuanto a la trama. 

- Un residuo de humanidad (Luis Carbajales). Un relato breve de acción, trepidante y virtuoso, aunque carente de atmósfera y de ejecución de la psicología de los personajes. 

- Jinetes de fuego (Laura López Alfranca). Una competición entre dragones en lo que se supone que es el deporte nacional de una Inglaterra previa a la Segunda Guerra Mundial. El relato en sí me ha gustado, aunque por su temática, me ha parecido fuera de lugar en esta antología.

- Elección envenenada (Rafael González).Quizás éste sea el relato que más me ha gustado. Bélico y oscuro como debe ser, narra la batalla entre los persas (versados en crear autómatas) y los ingleses (que disponen de una brigada misteriosa conocida con el nombre de Black Watch. Excelente.

- La revolución de los hermanos Serdán (Paulo César Ramírez). Nos encontramos ante el relato más flojo de toda la antología. Narra la revolución mexicana de forma demasiado extensa y confusa, llegando la historia a volverse pesada. 

- Quatromilla Miglia (José Ramón Vázquez). Otro de los relatos sobresalientes de la antología. En un mundo postapocalíptico, una pareja viaja en coche por la carretera. La ambientación es excelente, marcándose al rojo vivo el concepto de la soledad, omnipresente. Felicidades al autor.

- Retrópolis (Concepción Perea). Una buena historia que mantiene el listón alto. Desprende aventura a lo Julio Verne por cada uno de sus párrafos. Una ambientación excelente y un homenaje que bien merece esta antología.

- Te hemos seguido (Rodolfo Martínez). Y aquí terminamos. El autor escribe el relato más breve de la antología en forma de epílogo. Tensión y sorpresa para dejar un buen sabor de boca a una antología que merece ser, por derecho propio, una cita imprescindible de lo que se cocina en nuestro país.