Actividades para vacaciones ¡Manos a la cocina!

Por Mimamadice

Cocinar es punto de encuentro, de transmisión de saberes y tradiciones ¿Cuántas pláticas de cocina no hemos tenido? ¿Cuánto recuerdas a alguien que ya no está por una sopa o un olor al llegar a casa? La cocina nos remite a experiencias, a sabores, a recuerdos y añoranzas.

Cocinar va más allá del simple acto de comer, es la mezcla de sabores, de amor depositado y la alquimia que realizamos con los ingredientes lo que la hace –entre otras cosas- tan especial.

Además dentro de la cocina podemos realizar muchas actividades que construyan nuevos saberes.

Actividad para vacaciones: Smothies. Nuevos saberes

En esta ocasión prepararemos smoothies, que son bebidas frías que conjugan sabores, texturas e ingredientes novedosos. Tienen la ventaja de que no se necesita fuente de calor para su realización, reduce al máximo el uso de cuchillo y el nivel de dificultad es mínimo. Siendo estas las primeras buenas razones para comenzar a integrarlos en la educación infantil.

Entrar a la cocina con niños puede ser una tarea temida por muchos padres, el solo hecho de pensar en todo lo que puede suceder nos puede causar mareos, pero por fortuna podemos encontrar el lado divertido, educativo y de interacción que haga de esta actividad un momento de intercambio, aprendizaje y alimentación.

Aprender en la cocina, puede ser mucho más sencillo de lo que aparenta serlo.

En torno a los smoothies, podemos desarrollar muchas temáticas de aprendizaje experiencial y significativo para los niños, al tener la oportunidad de manipular y elaborar sus propios alimentos incrementamos la curiosidad, el deseo por probar nuevos sabores y motivamos también para el aprendizaje.

No importa la edad que tengan nuestros hijos, podemos incluir temáticas adecuadas y apropiadas que despierten su interés y curiosidad. Una buena idea para comenzar es realizar nuestros propios mandiles y gorros de chef, no necesitamos materiales complicados ni costosos. Mira la siguiente propuesta:

Listos con nuestra indumentaria, podemos comenzar con muchas actividades ¿De qué podemos hablar?

En primera instancia podemos desarrollar hábitos, Hábitos alimenticios saludables, de higiene personal y hábitos de limpieza y orden. Con actividades básicas y continuas como: Lavarnos las manos antes y después de cocinar, al finalizar levantar lo que hemos utilizado.

Otras propuestas:

Actividades sensoriales: la comida es una actividad en la que podemos involucrar todos nuestros sentidos al mismo tiempo, tocaremos las distintas texturas, los diferentes olores, miraremos las variadas tonalidades de colores y probaremos sabores contrastantes.

Identificar texturas, tonalidades, olores y sabores.

Habilidades personales: al cocinar realizamos trabajo en equipo y aprendizaje cooperativo, desarrollamos la creatividad y el sentido artístico. Involucramos habilidades de organización, planificación y autocontrol.

De aprendizaje: Seguimiento de instrucciones, psicomotricidad fina y áreas de conocimiento concretas como lenguaje, matemáticas, naturales, etc.

Cuando están pequeñitos un smoothie puede ser un buen pretexto para incrementar el vocabulario de los niños, mencionaremos todos los ingredientes, explica lo que vas haciendo y agrega expresiones que estimulen su lenguaj ¡mmmm que rico! ¡Me encanta el sabor de las fresas! ¿Te gustan? ¿Quieres más?

También puedes incluir conceptos básicos de matemáticas, conforme la edad.

  • Ponemos 2 fresas, medio plátano y un vaso de yogurt ¿Qué más nos falta?
  • Para niños más grandes podemos incluir conceptos de correspondencia, conteo, fracciones, repartir, dividir…

Sí partimos esta manzana así y así ¿Cuántos pedazos tenemos? ¿Cuántos vasos necesitamos para qué todos tomemos smoothie? ¿Puedes repartir un popote para cada uno de los vasos?

*Utiliza taza y cucharas medidoras para los ingredientes.

Una ventaja extra en estas actividades es que se pueden incluir actividades que favorezcan la lectoescritura, las cuales se pueden ir graduado según la edad de los niños.

  • Sin importar la edad podemos hacer un recetario con todas las mezclas que hemos hecho.
  • Haremos la lista de mercado para poder comprar los ingredientes.
  • Podemos incluir etiquetas identificadoras para los miembros de la familia, o para los envases que contienen productos con los que preparamos los smoothies como la avena, amaranto o chia.

No consideres un impedimento el que tu hijo no sepa escribir o leer, puedes utilizar imágenes de la web para hacer las listas de compra, puntear las palabras para que ellos las marquen y realicen las etiquetas, hacer dibujos y tú escribir las palabras abajo.

La creatividad y disposición hará que juntos disfruten de un aprendizaje con significado que a partir de experiencias novedosas creen nuevos conceptos y estructuras mentales.

Personalmente creo que el smoothie se basa en creatividad, miras rápido que tienes en la nevera y mezclas. Mantienes ciertos elementos base como la fruta, el jugo o el yogurt y listo.

  

Cerrando actividades, es importante que demos cierre a las actividades que comenzamos, de esta forma brindamos una estructura a los niños. Puedes hacerlo mientras beben su smoothie o al lavar los utensilios.

Cosas de las que podemos hablar ¿Qué colores vimos en las frutas? ¿A qué olía? ¿Era dulce, salado, amargo? ¿Cómo se sentía? Podemos describir los alimentos que hemos probado ¿Qué diferencia hay entre la textura de un plátano y la de una fresa? Y ¿del sabor?

Pueden planear juntos la siguiente lista de compra, pensar en nuevos ingredientes y sobre todo disfrutar de estos momentos juntos.

Gracias por leer mi mamá dice