Adaptaciones literarias: el origen de esta idea

Publicado el 22 marzo 2019 por Carmelo Carmelo Beltrán Martínez @CarBel1994

El artículo Adaptaciones literarias: el origen de esta idea es propiedad de Carmelo Beltrán.

Las adaptaciones literarias son algo de nuestro día a día. Ya a nadie le puede sorprender que una película esté basada en una novela o que haya tratado de ser adaptada por completo a la pequeña o gran pantalla. Por supuesto, esto no solo tiene impacto en el mundo cinematográfico, sino que otras vías de contar historias como el teatro o los videojuegos, también se han visto beneficiados. Pero, ¿alguna vez te has preguntado cuál es el origen de este mecanismo?

El origen de las adaptaciones literarias

Hablar de adaptaciones literarias en la industria del cine implica viajar al origen de esta. Desde sus primeros pasos ya se transportaban obras de la literatura hasta la gran pantalla.

Uno de los nombres propios a señalar es el de George Méliès. Pionero en técnicas cinematográficas, en 1899 estrenó dos adaptaciones literarias. La primera se trataba de La Cenicienta, que estaba basada en la novela de los hermanos Grimm y King John, que es la primera película que se conoce basada en el trabajo de Shakespeare.

La primera adaptación literaria de género literario

Un año después, en 1900, llegaría al cine la primera adaptación literaria de género policíaco. Se trataba de Sherlock Holmes perplejo y era una película en la que el autor, Arthur Conan Doyle, aparecía involucrado en un robo pseudosobrenatural.

Fue dirigida por Arthur Marvin y su duración es de únicamente treinta segundos.

La ciencia ficción en las adaptaciones literarias

En 1902 se lleva al cine la primera adaptación literaria. Se trata de Viaje a la luna, una historia dirigida por Georges Méliès y que tomaba su inspiración en dos de las novelas más populares de la época: De la tierra a la luna de Julio Verne y de Los primeros hombres de la luna de H.G. Wells.

La primera adaptación literaria de Hollywood

La primera adaptación literaria que se rodó de manera íntegra en Hollywood fue El prófugo, una película dirigida por Cecil B. DeMille en 1914. Estaba basado en la novela de Edwin Milton Royle, cuyo nombre era el mismo.

La adaptación literaria que supuso un punto de inflexión

Si hay que destacar una adaptación literaria que supuso un punto de inflexión en cómo se tenía que trabajar a partir del material de la literatura, esta fue La avaricia. Una película rodada en 1924 por Erich von Stroheim. Estaba basada en la novela McTeague de 1889, que había sido escrita por Frank Norris.

El director se había propuesto rodar hasta el último detalle de la novela. No quería dejarse nada fuera. ¿El resultado? Una película que superaba las nueve horas y media de duración. El estudio que pagaba el trabajo de Erich von Strohein le pidió que redujera el tamaño, pues no podían permitirse producir una obra de tales proporciones. De esta manera, la obra se contrajo hasta las dos horas y media, siendo un auténtico fracaso en taquilla.

Después de ello, el director continuó trabajando en su película y vio la luz una de cuatro horas. Esta se considera como una de las mejores de la historia.

Este es el origen de las adaptaciones literarias. Espero que os haya parecido interesante y que dejéis en los comentarios vuestras opiniones al respecto. Como siempre, ha sido un placer charlar con vosotros y nos veremos muy pronto en un nuevo artículo.

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