Amigas de esta niña contaron que habían visto en Facebook una publicación donde se despedía de este mundo, además de haber recibido en sus celulares mensajes de texto revelando la misma intención de parte de la menor.
Otra de las menores señaló que el mensaje decía que haría un “viaje largo”, pero que no se imaginó que se quitaría la vida. Facebook no tiene la culpa en estos casos, pero llama la atención que pese al alcance que tiene la red social, y la cantidad de “amigos” que podemos tener allí, nadie de su círculo cercano fue capaz de dilucidar y conectar estas palabras de despedida con lo que después terminaría en un suicidio.