Hoy me gustaría sacar del álbum de fotos de nuestro Madrid una que creo que os sorprenderá mucho. Se trata de una de las infraestructuras más conocidas de la ciudad y por la que pasan al año alrededor de 50 millones de pasajeros. En efecto, como muchos habréis descubierto, se trata del aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas. ¿Queréis que sigamos indagando un poco más en alguno de los aspectos más curiosos de él?
La fotografía que he puesto en la cabecera del artículo se sacó pocos años después de su inauguración, en los años treinta del siglo XX. Este pequeño aeropuerto, a poca distancia del pequeño pueblo de Barajas, se situó sobre un páramo natural de 100 hectáreas. Está nueva infraestructura vino a sustituir a los aeropuertos sureños de Carabanchel y Getafe.
Las décadas se fueron sucediendo y de la mano del desarrollo económico del país el aeropuerto fue sufriendo diversas ampliaciones para prepararse para albergar cada vez más pasajeros y aviones. El crecimiento fue exponencial alcanzando el medio millón de pasajeros en los años cincuenta, los cuatro millones en los años setenta, los treinta millones en el año dos mil y superar los sesenta millones en el año dos mil diecinueve.
El aeropuerto ha tenido tres nombres a lo largo de su historia. Originalmente se denominó Aeropuerto Nacional de Madrid. Pocas décadas más tarde, en los años sesenta, pasó a denominarse Aeropuerto Madrid-Barajas. Hace relativamente poco tiempo, como homenaje al primer presidente de nuestra democracia reciente, el nombre sufrió una pequeña modificación para quedar como resultado Aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas.
Espero que hayáis disfrutado de esta historia tan apasionante del quinto aeropuerto más importante en volumen de pasajeros. Si queréis disfrutar un poquito más de fotos históricas del aeropuerto, os dejo este enlace a la página del Ministerio de Transportes, de donde se han sacado alguna de las fotos que veis en el artículo ¡No os defraudarán!
¡Disfrutad del día y dejad volar vuestros sueños!
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