afortunados...los que hemos vivido dos formas de vida y sabemos de lo que hablamos.

   Una vida, la de ser parte de la gran masa, bajo su doctrina, sus ropas, sus servicios, sus dependencias, su moda, su estética, sus deportes, su status, sus normas en un escenario gris decorado con grandes edificios , que ciegan la vista al horizonte, una vida entre hamburguesas, tiendas de ropa. Entre cines y fiestas, atrapados en un mundo laboral de mentiras e hipocresias, cansados y aburridos de esa vida fácil, la de la generación del " mando a distancia", hemos tirado las tarjetas de crédito a la basura para buscar la luz de las estrellas colgadas en el firmamento.

  Otra vida , una segunda vida distinta dentro de la misma pero diferente, digamos que es otra oportunidad de abrir espacio a tu paz interior para dar rienda suelta a una galopada de sensaciones en un entorno natural y en unión espiritual con "la madre tierra", diciéndole adios a un mundo banal, lleno de sinsabores y sinsentido para atrapar con una simple sonrisa un pedacito de felicidad, respirando aire fresco de verdad, saboreando un tomate recien cojido de la rama de su lecho, descubrir como un  frescor inunda tu cuerpo de sensaciones deleitando así algo tan sencillo como saborear un exquisito tomate rojo arrebatado de su planta para convertirse en un placer gastronómico, sin más adornos, sin marketing, sin aditivos que algo natural que has sembrado y recogido su fruto, no era tan complicado como algunos decían, al contrario, la tierra, trabajarla , cuidarla y quererla te libra de la enfermedad actual, la depresión, todas estas reflexiones  nos lleva a recordar los hombres que fuimos ayer, antes de convertirnos en lo que ahora somos....."una gran masa manipulada y dormida bajo los barrotes de una gran jaula gris y negra , a la última"

 Utrella!!!