Escribe: Rogger Alzamora Quijano
El latin jazz se origina a comienzos de los años 40, pero es en los albores de la siguiente década cuando Dizzy Gillespie y Stan Kenton refuerzan la mezcla de los sonidos afro cubanos con los del jazz norteamericano. Grandes músicos como Charlie Parker, Machito, Bauzá, Pozo, Santamaría, fueron aportando lo suyo a los desafíos que ya Armstrong, Calloway, Moten, por citar algunos, habían propuesto. Y es en 1947 cuando aquella fusión de ritmos y genios da su primer fruto en un mágico concierto en el Carnegie Hall (con Gillespie, Pozo, Calloway), que ha pasado a la historia por su valioso testimonio de la influencia afro cubana para la música en general.
Dizzy Gillespie apostó decididamente por el naciente género y logró indudables piezas de colección. Ramón “Mongo” Santamaría, genial percusionista y compositor cubano, sucesor indudable de Chano Pozo asimismo ha brindado piezas de culto en el género. De estilo muy personal, único, con predilección por los graves, Mongo propagó el sonido de sus congas por todo el universo musical, comenzando por Nueva York. Ahora se puede decir que el sonido afro cubano es indispensable en todo género.
El Latin jazz se basa en la clave afro cubana marcada por congas, timbal y güiro. Esa es su diferencia esencial y espiritual con el jazz tradicional. Luce su calor trepidante, su exotismo, la sensualidad y el alma latinas. Alimentada por ese sabor festivo, el jazz latino o latin jazz se eleva difundiendo sus propias sensaciones, exaltación y trance. A ese nivel se llega con la sensacional trompeta doble tempo de Gillespie y la percusión inequívoca de Santamaría. Ciertamente hay temas grandiosos de ambos juntos y por separado, pero citando el dicho en gustos y colores… me permito elegir.
La unión de Mongo y Dizzy fue un regalo para la música. Dos apasionados del sonido negro, dos escuelas distintas pero congruentes, dos genios paralelos que, no obstante, lograron unificarse para fortuna del oído humano.
Cito, afirmo y suscribo, del disco Summertime*:
1.- Afro Blue (John Coltrane/Mongo Santamaría)
2.- Mambo Mongo (William Allen)
Dejo además, uno de Mongo y Orquesta y otro de Dizzy y Orquesta con Chano Pozo, es decir, cada cual con lo suyo.
Sofrito (Neal Creque)
Manteca- (Gillespie/Pozo/Fuller)
Comparto mi total disfrute con mis queridos lectores. Ninguna duda sobre la altura del mejor latin jazz. Y para cerrar, la orquesta del gran Machito (Francisco Raúl Gutiérrez Grillo) y su “Congo Mulence”, espectacular muestra del por qué el latin jazz tomó su pedestal en el mundo musical. Aunque el post trata de Dizzy y Mongo, nadie podrá reprochar que haya incluido este premio plus.
Congo Mulence (Ahmad Kharab Salim / Machito)
*Ficha técnica:
SUMMERTIME – Originalmente lanzado en vinilo, sello Pablo, (2308-229). Grabado en vivo por Ron Wynn en Mountain Studios, Montreux, Suiza, el 19 de julio de 1980. Remasterizado digitalmente por Phil De Lancie, Fantasy Studios, Berkeley 1991.
Lado A - Virtud, Afro Blue
Lado B - Summertime, Mambo Mongo
Músicos: Mongo Santamaría, Toots Thielemans, Berríos, Villarini, Harris, Hoist, Hamilton, Smith,