En bandeja de plata y servido en caliente, la Sala El Sol acogió la primera cata de Get Out. Por mi parte, 5 estrellas Michelín, y recomendación expresa de Purple neon lights, There she goes y Long Road de entre las 'nuevas recetas'. Me moría de ganas por escuchar esta última en directo, y me morí de gusto al hacerlo.
Guitarras atronadoras desde que Álvaro (voz y guitarra), Utah (bajo), Ramiro (batería y voz), Rafa (guitarra y coros) y Martín (teclado y percusión) pusieron pie en el escenario y sin darnos tiempo a reaccionar empezó el tiroteo: Shake, shake, shake, Pretty slick y Easy for you try ¡pam, pam, pam! Take it easy y el saludo y agradecimientos de Álvaro tampoco trajeron la paz y prosiguió el despliegue de artillería pesada con The right song y That's New York. Después de un repaso sin tregua por 80.81 y Look Inside, Now! Get Back dió el pistoletazo de salida a los temas de Get Out.
No cabe duda de que a estos chicos la treintena les ha sentado muy pero que muy bien y que el 'apogeo sexual' les tiene en plena forma; Álvaro vs. Rafa, Rafa vs. Utah, Utah vs. Álvaro y Rams y Martín contra sí mismos en la batería y el teclado. Fue una batalla constante de todos con y contra todos que llevó a finales apoteósicos en canciones como Take it easy o Come running, broche final del concierto.
Gracias a Rams y su entrada en acción como vocalista pudimos recuperar el aliento, que al menos en las primeras filas nos faltó en algún que otro momento. Tan simpático y gamberro como siempre se convirtió en el protagonista de That's New york y A Subtle Hint.
Pero aún con concesiones, el ritmo del concierto fue realmente vertiginoso. Directo y al grano,haciendo acopio de la esencia de Get Out. Y siguiendo en esa misma línea, en está ocasión se regodearon más que nunca en su actitud rockera que les caracteriza llevándola por el camino de la galantería chulesca no apta para cardiacos. Bailé, grité y salté. Me atreví con la guitarra y la batería, chasqueé los dedos, silvé y moví la cabeza al ritmo. Y con Long Road me solté la melena por completo... ¡Una verdadera gozada!
Hubo lluvia de confetis de despedida. Pero todos sabíamos que aún quedaban otro par de temas por lo menos. Fueron tres. Y sin mucho paripé, 'si queréis más sólo tenéis que pedirlo' comenzaron los bises. Dedicatoria especial a 'l os que han estado ahí siempre' en Walking on the river, canción para todos los público con On the radio y un cierre potente donde los haya con Come running. Se echó en falta el mítico grito de guerra... Tan sólo un ¡Right on, Right on! y bastante tímido, ¿Lo habrán cambiado por el ¡Come on, come on!?
Los directos siempre han sido uno de los sellos de calidad de The Right Ons y así lo avalan los cientos de salas que han recorrido con 80.81 y Look Inside, Now! en territorio nacional y las giras por EE.UU., América Latina y Asia que han tenido en los últimos años. En esta ocasión el cartel de 'sold out' que se colgó días antes del bolo ya denotaba ese interés en alza que se ha despertado con este último trabajo. Y ellos, no defraudaron.
Hay que decir también, que cuando The Right Ons salieron al escenario se encontraron con una sala abarrotada y el ambiente ya caldeado por la actuación de His Majesty The King que presentaron los temas de su primer LP, Long Story Short. Viejos compañeros de escenario que una vez más se ratifican una como un buen tándem. Escuchamos su primera canción en castellano, Idiota, muy buena y muy acorde con su estilo de 'pop-ruidoso'. Versionearon Breed de Nirvana, y Clara y Nacho volvieron a intercambiar papeles ' Uh!...Uh, uh! ' ¡Hay que ver cuánto ha mejorado esta chica con la batería!
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