Bracara Augusta fue una importante ciudad comercial que se benefició enormemente del tráfico marítimo intenso y bien organizado que unía a los diversos centros productores del Imperio Romano. Entre los productos comercializados, destacaban la cerámica, el vidrio, objetos de lujo y productos alimenticios como el vino, productos elaborados de pescado y el aceite. La posición geoestratégica de Bracara Augusta, como un mercado importante, favoreció el establecimiento de artesanos y talleres especializados de cerámica, producción de vidrio, fundición de bronce, oro y hierro, así como la industria textil y la fabricación de pigmentos. Aunque estos talleres se localizaban preferentemente en las afueras de la ciudad, también se encontraron rastros de sus ubicaciones dentro de Bracara AugustaEn 388 se fundó el Obispado de Bracara, convirtiéndose Paterno en el primer obispoAlta Edad MediaDominio suevo y visigodoLa caída del Imperio romano dio lugar, en 411, a la conquista de la Gallaecia por los suevos, que mantendrían la capital en la ciudad hasta la derrota de estos por
Braga permanecería bajo dominio visigodo hasta la invasión musulmana de HispaniaDesde la conquista musulmana hasta el siglo XEn el año 716, los árabes conquistaron Braga, lo que causó graves daños en la ciudad, en gran parte debido a su importancia religiosa. Fue reconquistada en 868por Alfonso III de AsturiasEn 883, Alfonso III confirmó la donación de Montélios (en la actual freguesia de Real) a Compostela y en 887 donó el territorio de Dume a Rosendo, obispo de Mondoñedo Cuando, tras su fallecimiento, Alfonso III el Magno dividió su reino entre sus hijos en 908, asignó el Reino de Galicia a Ordoño I de Galicia, que fijó su capital en Braga. No obstante, la muerte de su hermano García I le otorgaría la corona
Baja Edad MediaDesde el siglo X hasta la independencia de PortugalEn el siglo XI la ciudad fue reorganizada, probablemente con la nueva denominación de Braga. La construcción de la muralla de la ciudad y de la catedral se inició por orden del obispo Pedro de Braga, sobre los restos de un antiguo templo romano dedicado a la diosa Isis, que más tarde se convirtió en una iglesia. La ciudad se desarrolló alrededor de la catedral, quedándose confinada al perímetro amurallado. En 1071 se fundó el arzobispado de Braga, convirtiéndose Pedro en el primer arzobispo. Con la elevación del obispado de Braga a arzobispado, la ciudad recuperó una enorme importancia en la Península IbéricaEn 1093, Braga fue ofrecida como dote por Alfonso VI de León, a su hija Teresa, en la ocasión de su matrimonio con Enrique de Borgoña, conde de Portugal. Estos fueron los señores de la ciudad entre 1096 y 1112. En 1112, Enrique de
Desde la independencia de Portugal hasta el siglo XVTras la independencia de Portugal, proclamada por Alfonso Enríquez en 1139 y reconocida por Alfonso VII de León en 1143, Braga pasó a formar parte del nuevoreino.En 1327, el rey Alfonso IV invadió la jurisdicción temporal del entonces arzobispo Gonçalo Pereira, abuelo del general portugués Nuno Álvares Pereira, y nombró notarios del reino a Braga. El arzobispo los excomulgó y los expulsó de la ciudad. En 1341 las autoridades reales volvieron a entrar en la ciudad, por lo que el arzobispo volvió a excomulgarlos. El corregidor Afonso Domingues tomó el castillo y el palacio municipal. Más tarde estos edificios fueron restituidos al arzobispo, por Alfonso IV Mientras, en 1336, fue construido el Palacio Arzobispal original, por el arzobispo Gonçalo Pereira.]En 1402, el arzobispo Martinho Afonso de Miranda dio la jurisdicción de la ciudad a la corona, a cambio de rentas y otras concesiones, así como de la regulación de las obligaciones de los agricultores y artesanos de Braga, incluyendo las obras de reparaciones del palacio.En 1472, el rey Alfonso V restauró la jurisdicción temporal de Braga al arzobispo Luís Pires. Los arzobispos comenzaron a utilizar el título de "señor de Braga y primado de las Hespanhas".Edad Moderna y Edad ContemporáneaDesde el siglo XVI hasta el final de la monarquíaEn el siglo XVI, el arzobispo de Braga, Diogo de Sousa, modificó profundamente la ciudad, con la construcción de nuevas calles, plazas y nuevos edificios, lo que causó también el crecimiento de la ciudad más allá del perímetro amurallado.Desde el siglo XVI hasta el siglo XVIII, por intermedio de varios arzobispos, los edificios de arquitectura medieval fueron progresivamente reemplazados por edificios construidos según la arquitectura religiosa de su tiempo.En el siglo XVIII, Braga se convirtió en el ex libris del Barroco en Portugal. Una vez más, por intermedio de varios arzobispos, los edificios religiosos se cambiaron de nuevo con la introducción de los estilos barroco y neoclásicoSiglo XX (Finales de la monarquía y República)En el siglo XX se produjo una revolución en el transporte y en la infraestructura básica. Fue reformulada la avenida da Liberdade, donde se destaca el Teatro Circo y los edificios de la zona este. A finales del siglo XX, Braga tuvo un gran desarrollo y se convirtió en la tercera ciudad del país fuera de las áreas metropolitanas de Lisboa y Oporto, un estatus que mantiene en la actualidad. El 28 de mayo de 1926, el general Gomes da Costa comenzó en esta ciudad la
Actualmente, Braga es una de las ciudades más jóvenes de Europa, por lo que es una ciudad dinámica y enérgica.La archidiócesis de BragaMención especial en la historia de la ciudad la merece la archidiócesis bracarense. Creada en el siglo IV, tenía prominencia entre los otros obispados de la Gallaecia, celebrándose en ella varios concilios (se destaca entre ellos el de 563, que condenó como herejía el priscilianismo). La invasión musulmana supuso su desaparición, resurgiendo en el año 1071. Los conflictos con las autoridades eclesiásticas de Santiago de Compostela no impidieron la construcción de una catedral que, tras ser destruida por un terremoto en 1135,
GastronomíaBraga es famosa por sus numerosas recetas de bacalao (bacalao à Narcisa, bacalao àMinhota, bacalao à moda de Braga, entre otras). Otras comidas típicas de Braga incluyen el arroz con pato, papas de Sarrabulhocon rojões, tripa enfarinhada, farinhotes, embutidos de sangre, cabrito à moda de Braga, frigideiras, Rojões à moda do Minho, el pollo pica no chão, el vino verde, el pudín abad de Priscos, el tocino de cielo, el Roscón de Reyesescangalhado, fidalguinhos, pederneiras, suplíciosy paciências.Patrimonio histórico-artístico
- Elevador do Bom Jesus
- Catedral de Braga (en portugués: Sé (Braga))
- Sameiro (santuario)
- Castelo de Dona Chica (castillo)
- San Fructuoso de Montelius
- Monasterio de Tibães
- Theatro Circo
- Siete Fuentes
Al final, perdida casi una hora y media, opté por dejarme llevar de mis recuerdos y conseguí encaminarme al centro, al Campo da Vinha, en el que hallé un aparcamiento subterráneo en el que dejé el coche, para seguir a pie (y, por cierto, con mucho calor) hasta la Avenida da Liberdade –muy alterada, con un túnel bajo ella-, previo comunicar al amigo que ya habíamos sido “rescatados” del despiste. Nos encontramos cerca de su residencia, y el abrazo con Alberto Jorge fue intenso en emociones, dando paso a que presentara al mismo y a su esposa María Luisa, a mi mujer, Tamara.
Habíamos cumplido un deseo, cuyo resultado nos había sabido a poco, pero sobre todo habíamos refrescado vivencias de la amistad y aprendido una cosa para viajar: si se usa el navegador hay que programarlo correctamente, porque en otro caso, se “desnavega”…SALVADOR DE PEDRO BUENDÍA