Si comparamos estos porcentajes con otros países, EEUU y China son los más comprensivos con sus terminales de acceso, con un 14% de agresores y los alemanes -como el niño del vídeo- los más agresivos, con una cifra que aumenta hasta el 23%. Tal vez sea necesario que el motor de Europa instaure una sociedad protectora de ordenadores.
Quizá la extrapolación de esta actitud explique lo que esperan de nosotros, sus vecinos del sur, y cómo nos tratan cuando frustramos sus expectativas. Pero por aquí tenemos más aguante con que nos tomen el pelo. Aunque, puesto a profundizar en esto de la violencia digital, es España nos falta por averiguar quién lobotizó el ordenador de Barcenas.
No más maltratadores de chips.
Tolerancia cero bits.
Solidaridad con los circuitos impresos afectados.
alfonsovazquez.comciberantropólogo