La Quinta Conferencia de las Partes (CdP 5) del Convenio de Estocolmo sobre Contaminantes Orgánicos Persistentes (COPs) que se reunió, entre el 25 y 29 de abril pasado, en Ginebra, Suiza, aprobó la incorporación del endosulfan a su Anexo A. Esto quiere decir, prohibir su uso.
La delegación argentina, compuesta por Daniel Mazzarella (Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria del Senasa) y Romina Bocache (del Ministerio de Relaciones Exteriores) tuvieron una activa participación en el Grupo de Contacto sobre endosulfan.
Por eso ahora el Senasa está impulsando un plebiscito que se realizará hasta el 21 de junio, donde el “objetivo del proyecto es acompañar la normativa internacional atendiendo a la preservación de la salud humana, animal y del ambiente”.
En distintos puntos del país se levantan desde hace tiempo voces en contra del uso de los agrotóxicos, alertadas ante el efecto nocivo de éstos en la salud, y exigiendo se respete el principio precautorio. El avance de la frontera agrícola, impulsado por el alto valor de la soja y políticas gubernamentales que avalan, a veces subrepticiamente, el cultivo de esta oleaginosa, trajo de la mano un incremento del volumen de químicos y productos anexos utilizados para protegerla.
En un contexto provincial donde legisladores intentan normar el uso de los agrotóxicos y las fumigaciones aéreas, el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) encaró una consulta pública sobre la iniciativa de resolución para establecer los plazos de prohibición total del uso, importación, elaboración y formulación del principio activo endosulfán y sus productos formulados. El plebiscito se realizará hasta el 21 de junio, donde el “objetivo del proyecto es acompañar la normativa internacional dictada al respecto, atendiendo a la preservación de la salud humana, animal y del ambiente”.
Para la redacción del proyecto que presenta el organismo nacional ante la ciudadanía se tuvieron en cuenta regulaciones que propenden a la eliminación definitiva del uso del endosulfán. Así, se basó en las normativas vigentes en la Unión Europea (2 de diciembre de 2005), la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos – EPA (10 de noviembre de 2010), Brasil (9 de agosto de 2010), Convenio de Estocolmo (13 de diciembre de 2009), Convenio de Rótterdam (2 de septiembre de 2010).
De esta forma, la Argentina está recorriendo un camino hacia la eliminación definitiva del insecticida endosulfan, y el mismo camino está transitando la región respecto al producto. Países como Brasil, Paraguay y Colombia, entre otros, han impartido normas respecto a la restricción y/o eliminación del endosulfan y se han proclamado a favor de la entrada del producto al Convenio de Estocolmo tal como fuera realizado por Argentina en la sesión plenaria.
“La Argentina ha venido trabajando desde hace tiempo en este tema sensible, máxime tratándose de un país agroexportador que usa el endosulfan en varios productos. Gracias a este trabajo serio y comprometido y a la voluntad de proteger la salud humana y el medio ambiente, un proyecto de normativa para prohibir el endosulfan en el país se encuentra en estos momentos sujetos a consulta pública antes de su aprobación final”, se indicó desde el Senasa.
Fuente: diarioelargentino.com.ar