Aguacero, la renovación de la novela negra policíaca

Publicado el 04 junio 2016 por Librodelosviernes @libro_viernes

Aguacero. Luis Roso

Estos días, la literatura española ha podido descubrir un nuevo y joven escritor que ha debutado con una novela negra ambientada en la España rural de los años cincuenta. Críticos y lectores que la han disfrutado en primicia, antes de su publicación el pasado 1 de junio, han coincidido no sólo en destacar la pericia narrativa de Luis Roso –que así se llama el autor–, y su capacidad para captar al lector desde el inicio; sino que hablan de una novela diferente dentro del género, incluso renovadora. Aguacero, un gran debut literario comparado con Philip Kerr y Eduardo Mendoza.
Aguacero se sitúa en un pequeño pueblo de la sierra madrileña. A principios del año 1955 se convierte en el escenario de cuatro crímenes. Los guardias civiles Víctor Chaparro Lorenzo y Ramón Belagua Silva (un guiño a los personajes de la exitosa saga de Lorenzo Silva) han aparecido brutalmente asesinados. Aunque se detiene a un sospechoso, pronto aparecen otros dos cadáveres: el acalde del pueblo y su mujer. El inspector de la Brigada de Investigación Criminal Ernesto Trevejo y su ayudante el joven Aparicio Gutiérrez se hacen cargo del caso. “Una pareja con rasgos cervantinos; por el contraste y la complementación entre ellos, siguiendo la tradición literaria española en general y policiaca en particular”.
Una novela oscura y luminosa a la vez, describe Roso. La ironía y personalidad de estos dos personajes, concretamente, contrarresta el ambiente opresivo de la sociedad del momento que desprende la historia. También el humor que desprende, escenas y diálogos irónicos que, además, imprimen agilidad a la lectura; y que se asemejan con el estilo de algunos de los mejores títulos de Eduardo Mendoza.
«Un brillante relato policial, con dureza y ritmo. El Bernie Gunther de Philip Kerr tiene en el policía de Luis Roso un digno compañero.»   ̶Juan Carlos Galindo, El País


Luis Roso

Luis Roso (Cáceres, 1988) ha bebido de los autores de la Generación del 50 para recrear una magnífica ambientación histórica. Un viaje a la España rural de posguerra que ha conocido a través de las obras de Cela o Delibes, que se encuentran entre sus autores más admirados como Aldecoa, Ferlosio, Azorín, o De la Serna… El contexto histórico y ambientación –no hablamos sólo de la posguerra, sino de la España rural– suponen por sí mismos una vuelta de tuerca respecto a lo que se viene publicando hoy en día dentro del género. Una original puesta en escena que le ha valido el calificativo de renovadora.


«Todas las novelas policíacas son diferentes, pero solo algunas son especiales. Todas intrigan al lector, pero solo algunas atrapan hasta el desvelo.»   ̶Antonio Gómez-Rufo, novelista.