Editorial Montena ~ 9788484418610
La embarcación más lujosa de todos los tiempos, el Titanic, está a punto de zarpar con destino a Nueva York. En él viajará Tess, una chica de 18 años que trabaja como sirvienta y sueña con llegar a Estados Unidos para empezar una nueva vida, y también Álec, un atractivo viajero de primera clase, hijo de un poderoso magnate americano, por quien Tess siente una atracción instantánea. En un viaje marcado por la fatalidad, en el que los secretos más oscuros saldrán a la luz, Tess y Álec deberán romper la maldición que les acecha incluso en las oscuras aguas del Atlántico...
Correteando por la borda
Parece una verdad universalmente reconocida que Claudita y yo no nos llevamos del todo bien. Hace un par de años leí Medianoche, el primer libro de su saga de vampiros y no pasó de ser un libro normalito que me desaburrió un par de días pero no quise seguir la saga. Otro día aburrido tiempo después leí Balthazar, libro spinoff también de la misma saga Medianoche y bueno aparte de las risas y el rodar de los ojos, también es un libro entretenido a pesar de lo ridículo que es a ratos. Este libro llegó involuntariamente a mis manos el año pasado y lo primero que pensé fue que Claudita y yo nos volvíamos a encontrar.
Lástima que esta vez tampoco sea para sorprenderme demasiado.
Inglaterra, 1912. El trasatlántico más famoso de todos los tiempos está a apunto de zarpar y personas de todas las nacionalidades y las clases sociales viajarán en él. Entre ellos la familia Lisle, una familia con más nombre y abolengo que dinero y como no, irán en primera clase. Tess Davies tiene 18 años y es la criada de esta familia. A pesar de que Irene Lisle, de la que es criada es amable y comprensiva con ella, el resto de la familia es un espanto. Tess no ve la hora de usar los ahorros que ha ido recolectando hace mucho para cuando llegue a Estados Unidos, va renunciar a su trabajo y buscarse un mejor futuro en el país de las oportunidades.
Pero la noche antes de partir, cuando se dirige a una tienda por unos cordones la ataca un hombre lobo (en serio), pero es salvada en último momento por un joven que resulta estar guapo. A pesar del miedo, Tess logra llegar sana y salva a su casa. El siguiente día zarparán y todo será diferente.
Todos conocemos esta historia, TODOS hemos visto Titanic un trillón de veces. Yo la vi por primera vez en VHS y estaba partida en dos cintas porque así era en la época. Pero hombre, ¿que podrían contarme de nuevo sobre esta famoso y desafortunado barco? ¿Sobre el desastre marítimo más importante de todos los tiempos? Pues que a la autora se le ocurrió la idea de ambientar una historia de amor paranormal en el megabarco más grande de la época. Nunca había leído algún libro de ficción ambientado en un escenario real como es el Titanic. Pero empecemos a hablar del libro propiamente y de lo que me gustó y no me gustó.
Lo bueno
2) La protagonista: Tessa no es la típica tonta que tienes que aguantar y que se te hace un suplicio para cortarse las venas. La autora se encarga de darle un pasado, cierto transfondo de sus acciones y pensamientos y claro, del recelo contra la familia Lisle. A pesar de que aprecia mucho a Irene y la estima de verdad, Tess sueña con tener una vida sin tener que ser humillada y tratada como si fuera un fantasma. La protagonista de por sí salva el libro de la quema.
3) Ambientación: A decir verdad, la ambientación es un OK en esta novela. Es decir, las descripciones son buenas pero algo justas. No logré imaginarme del todo el Titanic y sus lujosísimos ambientes y las partes de tercera clase. Desde la perspectiva de Tessa se conoce mejor el trabajo de las criadas, la moda de la época y la forma de desenvolverse en esta sociedad tan clasista inglesa. Algunas partes están bien pero otras no tanto.
Lo malo
2) El romance: De nuevo tenemos un romance express en lo que dura la travesía del RSM Titanic. El tipo de turno se llama Alec Marlowe y es el hijo de un poderoso magnate norteamericano. Pero él tiene un problemita importante y tiene que lidar con le lo que dura la travesía. Pero cuando conoce a Tessa y empieza el idilio sobre las aguas del mar sigo sin tomármelo muy en serio. El no es una plana figura de cartón del todo, pero si tiene esos tópicos del género que está muy bueno y es algo desgraciado. Es decir, el romance no es insoportable, pero mejor tratado habría estado mucho mejor.
3) Lo que ya sabemos: TODOS sabemos que el Titanic golpeó un iceberg que le rompió demasiados compartimientos de flotación y luego de varias horas se hundió matando a 1520 personas que no se salvaron de las aguas heladas del Océano Atlántico.Eso se sabe, sucedió hace 103 años. Entonces yo quería saber como lo iba a tratar la autora en la novela. Se refleja muy bien los primeros momentos, el pánico y la tranquilidad de la gente de primera clase. "Ni Dios podría hundir este barco" se decían todos. Pero los momentos finales cuando el barco se parte y tal pasan demasiado rápido y hay poca descripción, lo que hace que el lector no se lo logre imaginar del todo. Gracias a dios que tengo la película en la cabeza y eso compensa lo poco que describe el libro.
La trama del lbro como tal no está mal, pero si es predecible en muchos momentos. Trata de armar un misterio y unas escenas paranormales buenas, pero no lo logra mucho. Como diría yo, pasa raspando el alambre de espino y se deja un pedazo en el camino.
El final intenta ser distinto pero al final recae en una sorpresa que me veía venir aunque esperaba que no pasara. O sea que fue predecible, aunque intentaba no serlo, al menos un poco. Entonces me mosqueo un poco y pienso que la novela pudo ser mejor de lo que pudo haber sido. La autora aclara que no quiso mencionar muchos personajes históricos para respetar la memoria de los fallecidos y sus familias, aunque hay una aparición estelar de Thomas Andrews, arquitecto del barco y que para muchos murió como un héroe. Pero poco más y creo que es mejor así. A pesar de los años sigue siendo un suceso histórico estudiado por muchos y que sigue generando tristeza a pesar de las generaciones.
Entonces eso es lo que pienso. Que pudo haber sido mejor de lo que fue. Pobrecita Claudia Gray, le seguiré dando alguna oportunidad con sus obras, hasta que vea alguna que sí me convenza de alguna manera.